Acusado de secuestro el patrón del barco naufragado por encerrar a los migrantes

• La Fiscalía señala al tunecino M. A. Malek como responsable del naufragio
• Dice que cientos de migrantes murieron encerrados en la bodega
• Malek asegura que pagó por el viaje y que era "un pasajero más"
• Hasta 450.000 migrantes pueden tratar de cruzar el Mediterráneo este año

Llegan a Italia más inmigrantes mientras conitnúa la investigación del la tragedia en el Mediterráneo

La Fiscalía de Catania, que investiga el naufragio del pesquero con cerca de 850 migrantes en el Canal de Sicilia el pasado domingo, ha añadido el delito de secuestro a las acusaciones ya formuladas al patrón del barco, el tunecino Mohammed Alì Malek, por haber encerrado a cientos de ellos en la bodega.

En un comunicado, la Fiscalía explica que ha solicitado este miércoles al juez instructor la confirmación de la detención de las dos personas, Malek y el sirio Mahmud Bikhit, identificados entre los 28 supervivientes como los traficantes que les estaban llevando a las costas italianas.

Los fiscales de Catania han explicado tras haber tomado declaración a algunos supervivientes que se confirma la reconstrucción de los hechos, es decir que la embarcación impactó con el pesquero, ya que nadie la gobernaba, y que después volcó.

También los supervivientes han declarado que todos los que se encontraban en la cubierta inferior y en la bodega fueron encerrados con llave, por lo que nunca pudieron salir cuando la embarcación se hundió.

Por ello, Malek, considerado el patrón de la embarcación, ha sido también acusado de secuestro de personas con el agravante de la presencia de menores. Este delito se suma al de homicidio culposo múltiple, naufragio e instigación a la inmigración clandestina, por los que ambos habían sido ya acusados.

Sin embargo, Malek ha asegurado que pagó por el viaje y que era "un pasajero más". Además, según su abogado, el tunecino en el interrogatorio ha indicado que al mando de la nave se encontraba otra persona que murió en el desastre. En cambio, Bikhit, el presunto subalterno, lo ha señalado como "responsable" de los hechos.

Hasta 10.000 muertos si no se actúa

El secretario general de la Organización Marítima Internacional (OMI), Koji Sekimizu, ha afirmado en una conferencia en Singapur que hasta 450.000 migrantes pueden tratar de cruzar el Mediterráneo este año y ha advertido de que, si no se hace nada, podría haber hasta 10.000 muertos.

Sekimizu ha señalado que unos 170.000 inmigrantes intentaron atravesar el Mediterráneo para entrar en Europa en 2014 y más de 3.000 perdieron la vida, según la información del medio Seatrade.

El secretario general de la OMI ha indicado que no se había hecho nada desde entonces, por lo que ha instado a los gobiernos, particularmente a aquellos bañados por el Mediterráneo, a adoptar medidas de seguridad que atiendan este problema.

"La vergüenza de Europa"

El llamamiento de la OMI surge el mismo día en el que Amnistía Internacional (AI) ha exigido a Europa que ponga en marcha una operación conjunta para "salvar vidas en el Mediterráneo", tras constatar el aumento de las muertes de emigrantes y refugiados que tratan de alcanzar las costas de la Unión Europea tras el fin de la operación "Mare Nostrum".

En su informe "La vergüenza de Europa que se hunde: el fracaso de salvar a emigrantes y refugiados en el mar", la ONG señala que las capitales deben asegurar el "despliegue de medios navales y aéreos a un nivel acorde con las salidas (hacia Europa) previsibles, que deben patrullar en alta mar a lo largo de las principales rutas de migración".

La ONG ha recordado que Italia puso en marcha la misión naval nacional "Mare Nostrum", con un coste de 9 millones de euros al mes, a la que puso fin en diciembre de 2014 con el acuerdo de la UE tras solicitar de manera reiterada a sus socios comunitarios un mayor respaldo. Esta decisión "no ha tenido el efecto disuasorio que algunos gobiernos europeos habían deseado", recalca, y apunta que en los primeros tres meses y medio del año "un número récord de refugiados y emigrantes ha tratado de cruzar a Europa por mar".

AI ha indicado que durante el funcionamiento de la operación, una de cada 50 personas que hacían la travesía por el Mediterráneo morían, mientras que ahora esta tasa se ha elevado a una de cada 23 personas.

También ha subrayado que la operación de vigilancia costera "Tritón" puesta en marcha tras el fin de la misión italiana, que cuenta con un máximo de 2,9 millones de euros al mes, es "la respuesta equivocada" debido a sus limitaciones.

El pasado año, la Agencia Europea para la Gestión de las Fronteras Exteriores (Frontex) contabilizó 278.000 cruces irregulares de las fronteras europeas, dos veces y media más que en 2013 y dos más que durante 2011, cuando la inestabilidad que siguió a la Primavera Árabe provocó desplazamientos en la región.

La mayoría de estos, 218.000 cruces, se llevaron a cabo a través del Mediterráneo, según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), citado por AI.