El Gobierno paraliza la cesión del Registro Civil a los registradores de la propiedad y mercantiles
- El ministro de Justicia, Rafael Catalá, anuncia que buscarán otro modelo
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha anunciado este viernes que el Gobierno va a paralizar la tranferencia de la gestión del Registro Civil a los registradores de la propiedad y mercantiles y que va a abrir al diálogo con las partes implicadas el modelo de reforma de este servicio y los tiempos de aplicación.
Catalá ha realizado estas declaraciones a los periodistas a su salida del Tribunal Supremo, a donde ha acudido para participar en el acto de entrega de premios del Colegio de Abogados de Madrid, informa Efe.
El Gobierno "no va a proponer un modelo de reforma del registro civil que no sea compartido por el conjunto de los agentes" y por lo tanto abandona la propuesta que hasta ahora había promovido y también le fecha que tenía prevista para ponerlo en marcha (15 de julio), ha agregado.
La decisión del departamento dirigido por Rafael Catalá de encomendar a este colectivo este servicio ha levantado duras críticas en los últimos meses. Los partidos de la oposición, funcionarios de la administración de Justicia, sindicatos u otros colectivos como los secretarios judiciales, han expresado su oposición a lo que consideran una "privatización" encubierta.
Buscan propuesta compartida con sindicatos, autonomías y partidos
Lo que el Ejecutivo hará será abrir al diálogo esta reforma, que va a seguir promoviendo hasta encontrar una propuesta compartida por sindicatos, autonomías, partidos y otros agentes, ha dicho Catalá, quien ha advertido de que, en todo caso, no van a estar dialogando "sine die".
El Gobierno quiere "un servicio público de calidad, mejorar la gestión del registro civil para que de mayor calidad a los ciudadanos".
En ese sentido, ha recordado que en 2011 iniciaron su desjudicialización y plantearon que esa reforma consistiera en entregar a los registradores, que son funcionarios públicos, ese servicio. "Pero hemos constatado que existe una oposición importante por sindicatos y partidos", ha explicado.
Tras reiterar la voluntad del Gobierno "para seguir haciendo reformas, pero a través del dialogo y el consenso", el ministro ha incidido en que, al constatar esa falta de consenso, han planteado que no harán "bandera" de la fecha prevista y que esperarán alternativas al modelo.
"A día de hoy, de todos modos, todavía no hemos recibido ninguna alternativa, pero lo cierto es que le he transmitido al Colegio de Registradores que no vamos a imponer ningún modelo sin consenso", ha anunciado el ministro.