Bruselas investiga las ayudas públicas a las eléctricas en España y otros 10 países
- Es la primera investigación sectorial sobre mecanismos de capacidad
- Las eléctricas cobran más por garantizar el suministro
La Comisión Europea ha lanzado una investigación sobre las ayudas públicas que conceden España y otros 10 países a las eléctricas para garantizar la seguridad de suministro (los denominados mecanismos de capacidad) con el fin de verificar si favorecen a determinados productores o tipos de tecnología o si establecen barreras que obstaculizan el flujo de energía entre los Estados miembros.
Además de España, la CE investiga a Francia, Alemania, Italia, Polonia, Bélgica, Croacia, Dinamarca, Irlanda, Portugal y Suecia. En estos países existen mecanismos de capacidad o planes para ponerlos en marcha. Como regla general, prevén compensaciones suplementarias, además de los ingresos por la venta de electricidad, a cambio de que mantengan las capacidades existentes o realicen inversiones para garantizar el suministro.
"Los Gobiernos tienen un interés legítimo en garantizar que haya un suministro suficiente de electricidad y que los hogares y la industria no sufran apagones", ha dicho la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, en un comunicado.
No obstante, Vestager ha dejado claro que su papel es garantizar que "las medidas públicas para impulsar las inversiones en el suministro de electricidad no favorezcan indebidamente a determinados productores o tecnologías, o creen obstáculos al comercio a través de las fronteras nacionales". "Por ejemplo, en algunos casos puede ser más eficaz invertir en mejorar las interconexiones de la red de electricidad entre los Estados miembros que construir nuevas plantas de electricidad", ha apuntado la responsable de Competencia.
Respetar las reglas de la UE
Para Vestager, esta investigación sectorial "envía una señal clara a los Estados miembros para que respeten las reglas de la UE en materia de ayudas de Estado cuando pongan en marcha mecanismos de capacidad y contribuye al objetivo de construir una auténtica Unión de la Energía en Europa".
Se trata de la primera investigación sectorial que el Ejecutivo comunitario lanza en materia de ayudas públicas. Hasta ahora, las iniciativas similares de Bruselas se habían circunscrito a los posibles problemas de competencia en determinados sectores.
Bruselas enviará ahora una serie de cuestionarios a las autoridades públicas y los actores del mercado en los 11 Estados miembros investigados. Asimismo, se reserva el derecho de ampliar sus pesquisas a otros Estados miembros.
Después evaluará las respuestas y publicará un informe preliminar antes de fin de año, que someterá a consulta pública. Los resultados finales de su investigación se conocerán a mediados de 2016.