Varufakis culpa a sus socios de impedir a Atenas aprobar reformas mientras negocian un acuerdo
- Las instituciones rechazaron su propuesta de "negociar" y "legislar" en paralelo
- Eso, asegura, hubiera servido para crear la confianza que no tiene Grecia
- "Los socios consideran que toda legislación constituiría un acto unilateral"
- Niega haber dicho que el país se vaya a quedar sin liquidez en dos semanas
- Solicita al BCE retrasar los pagos de deuda que debe afrontar el país
El ministro de Finanzas griego, Yanis Varufakis, ha asegurado este jueves que las instituciones han impedido que el Gobierno de Atenas haya empezado a legislar ya las "muchas reformas" que son necesarias y ha recalcado una vez más que solo firmará un acuerdo que mire por la sostenibilidad de la economía.
"Hasta ahora no se ha aplicado ninguna de las muchas reformas que tenemos previstas, porque los socios quieren primero un acuerdo amplio y completo y consideran que toda legislación constituiría un acto unilateral, y por tanto un casus belli", ha aseverado Varufakis en una conferencia organizada en la capital griega por el semanario The Economist.
“Si Grecia no se reforma, se hundirá“
El ministro ha dicho que desde un principio los acreedores rechazaron su propuesta de "negociar" y "legislar" en paralelo, una acción que a su juicio hubiera servido para crear la confianza que Grecia no goza entre los socios.
Varufakis ha recalcado que el Gobierno de Tsipras está decidido a reformar "todo" en este país. "Para ser preciso, necesitamos reformarlo todo (...) Si Grecia no se reforma, se hundirá". Y como ejemplos, el ministro ha señalado que el país necesita "una reforma del sistema del IVA -no simplemente de sus tipos- del sistema de pensiones o de la administración fiscal".
No habrá acuerdo si va contra el crecimiento económico
El ministro ha lamentado que no se llegara a un acuerdo "interino" a finales de abril, como se pactó en el Eurogrupo el 20 de febrero, pero mostró su esperanza en que hasta junio se pueda alcanzar un amplio compromiso con las instituciones (Comisión Europea, Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional),
No obstante, el titular de Finanzas ha insistido en que no firmará ningún acuerdo que "no sea consistente en términos macroeconómicos", "sostenible", y suponga volver a los errores del pasado, es decir, aceptar condiciones que "nunca" se pueden cumplir y van en contra del crecimiento económico.
“Lo que necesitamos es inversión y reconstruir el flujo del crédito“
El error del pasado, ha señalado Varufakis, fue que en cada negociación se miraba únicamente por "lo que se debe hacer para lograr el próximo desembolso del rescate", en lugar de buscar soluciones que persiguieran la recuperación económica. "Lo que necesitamos es inversión y reconstruir el flujo del crédito, sobre todo a las empresas con orientación exportadora, y una amplia reforma del Estado", ha indicado.
En ese contexto, Varufakis ha vuelto a proponer la creación de un banco griego de inversiones al que fluyan fondos procedentes de propiedades estatales y de empresas privadas, que coopere con las entidades correspondientes a nivel europeo, como el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo o el Banco Europeo de Inversiones.
Varufakis pide al BCE que se retrasen los pagos de deuda
"Entre julio y agosto, el Ministerio de Finanzas tendrá que pedir prestado 6.700 millones de euros a nuestros socios de un modo u otro para hacer frente a vencimientos de bonos del programa SMP", ha asegurado Varufakis en referencia a los bonos comprados por el BCE bajo el programa de recompra denominado Securities Market Programme entre 2010 y 2011.
"Aún quedan unos 27.000 millones de euros de esos bonos, que deberían devolverse en los próximos meses o años. (La devolución) de esos bonos debería retrasarse al futuro distante. Eso está claro", ha señalado el ministro de Finanzas griego, para quien la deuda griega ahora no es viable.
Niega que Grecia se quede sin liquidez en dos semanas
En el debate posterior a su discurso, Varufakis se negó a poner una fecha al fin de la liquidez estatal y rechazó haber dicho que esto ocurriría en las próximas dos semanas.
"Nunca dije que tenemos dos semanas, el problema es que siempre se desconectan mis palabras. Lo que dije es que la liquidez es un problema, y luego, a la pregunta de cuándo debía haber un acuerdo, respondí que en dos semanas", ha explicado.