Emilio Lledó, un sabio de la palabra
- Es académico de la Lengua y Premio Nacional de las Letras 2014
- Es premiado por su trabajo intelectual y labor divulgativa
"Se ve que por la edad me está cayendo algún que otro premio en estos días”, decía Emilio Lledó el pasado noviembre al recibir el Premio Nacional de las Letras. Suma y sigue, el filósofo y humanista obtiene ahora el Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades. Un reconocimiento a su trabajo intelectual, pero también a su labor divulgativa.
“Lo que yo soy es palabra”, afirmaba en 2011 en el programa de TVE Pienso, luego existo, con el convencimiento de que “una de las misiones más importantes de la filosofía es la reflexión, el pensar en las palabras”. La hermenéutica, el arte de interpretar los textos, es el núcleo de su obra. “Debemos seguir interrogando al lenguaje para evitar que nos manipulen, que nos engañen, que nos ignorantifiquen”, defiende.
Culto, cercano y locuaz, sus amigos afirman que es capaz de recordar fragmentos completos de Platón en griego. Defensor de la educación y consciente del papel capital que los medios de comunicación, afirma que escuela y medios deben enseñar “esa liberación de la mente” porque “la vida tiene tal fuerza, tal positividad que hay que creer en ella”.
Nacido en Sevilla en 1927, en 1933 se traslada en Madrid, donde vive la Guerra Civil y se licencia en Filosofía y Letras y Filología Clásica. Su formación se completa con su marcha a Alemania, donde se doctora en la Universidad de Heidelberg y obtiene una beca de la Fundación Humboldt. Se centra entonces en la investigación de la filosofía alemana de postguerra.
Académico desde 1994
En 1955 alterna trabajos en la Universidad de Madrid con la Universidad de Heideberg, hasta que en 1962 regresa definitivamente a España, para ejercer la docencia en universidades de Valladolid, La Laguna (Tenerife) y Barcelona. Vicerrector de la UNED entre 1981 y 1984, en 1992 obtiene el Premio Nacional de Ensayo por El silencio de la escritura. Y en 1994 toma asiento en el sillón “l” minúscula de la RAE con un discurso titulado Las palabras en su espejo. En 2004, forma parte del comité de sabios, destinado a reformar los medios públicos de comunicación.
Además de sus más de 100 obras de investigación, entre sus libros destacan: Filosofía y Lenguaje (1971), La Filosofía hoy (1975), Lenguaje e Historia (1978), El silencio de la escritura (1981), El Epicureísmo (1984), El surco del tiempo (1992), Memoria de la Ética (1994), Días y libros (1995), Imágenes y palabras (1998), Elogio de la infelicidad (2005). En 2013 publica Los libros y la libertad, compendio de artículos y conferencias.
Ha sido galardonado en numerosas ocasiones, tanto en España como en Alemania. Miembro del Instituto Internacional de Filosofía, Lledó posee la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio y es doctor honoris causa por las universidades de La Laguna, de las Islas Baleares y de Lleida. Nombrado en 2003 Hijo Predilecto de Andalucía, ha sido galardonado con el Premio Alexander von Humboldt (Alemania, 1990), el Internacional Menéndez Pelayo (2004), el Fernando Lázaro Carreter (2007), el María Zambrano de la Junta de Andalucía (2008), el Giner de los Ríos de Sevilla (2013), el José Luis Sampedro del Festival Getafe Negro (2014), el Antonio de Sancha de la Asociación de Editores de Madrid (2014), el Internacional de Ensayo Pedro Henríquez Ureña de la Academia Mexicana de la Lengua (2014).