La segunda ciudad de Dinamarca se une a Copenhague en el boicot a Ryanair

• Por no firmar convenios laborales daneses para sus empleados en el país
• Los empleados públicos no pueden usar Ryanair en sus viajes de trabajo
• Aarhus se suma así a Copenhague y Albertslund, en el extrarradio de la capital

Un avión de Ryanair aterrizando en el aeropuerto de Manchester.

Aarhus, la segunda ciudad de Dinamarca, se une a Copenhague en el boicot a Ryanair por negarse a firmar convenios laborales daneses para sus empleados en el país.

"A partir de ahora usaremos aerolíneas que respeten los convenios vigentes y las condiciones laborales en el mercado de trabajo danés. Y por tanto Ryanair no es una de las compañías que podemos usar", ha declarado el alcalde de Aarhus, Jacob Bundsgaard.

Su homólogo de Copenhague, Frank Jensen, había revelado hace unas semanas al diario Berlingske la prohibición de usar Ryanair a los empleados del ayuntamiento en sus viajes de trabajo.

Jensen acusó entonces a Ryanair de promover el dumping social, lo que consideraba una "guarrería".

El ayuntamiento de Albertslund, en el extrarradio de Copenhague, también se ha sumado al boicot a la compañía, que en marzo empezó a volar desde la capital danesa, aunque ya lo hacía antes desde Billund, el segundo aeropuerto del país.

La negativa de la aerolínea irlandesa a firmar un convenio laboral danés ha provocado protestas en varios ámbitos y un conflicto en el Tribunal de Trabajo, que deberá decidir en los próximos días si otros sindicatos no afectados directamente pueden unirse a los paros y acciones de protesta.

Ryanair presentó recientemente una queja a la Comisión Europea (CE) por entender que el boicot de las autoridades de Copenhague viola las reglas de libre intercambio de servicios y favorece a otras compañías como la escandinava SAS.

Huelga indefinida del personal de asistencia en tierra en Madrid

Por otra parte, Ryanair tiene otro frente abierto en España, concretamente en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas donde los trabajadores de asistencia en tierra de la compañía están secundando un paro indefinido, que se inició el pasado sábado 30 de mayo, como protesta por "las condiciones laborales, abusos y amenazas a los que están sometidos".

El comité de empresa de Ryanair en Madrid ha denunciado que la aerolínea está permitiendo llevar exceso de equipaje en la cabina, con maletas ubicadas en aseos, en asientos vacíos o entre las piernas de los pasajeros, lo que contraviene las normas de seguridad aérea y supone un "grave peligro para los pasajeros", según fuentes del comité de huelga.

A este respecto, representantes de los trabajadores presentaron una denuncia contra la empresa ante la Guardia Civil de la T-4 por subir a bordo de los aviones "equipajes sin etiquetar".

Con anterioridad, el comité de empresa del personal de tierra de Ryanair presentaba este lunes una querella contra la empresa y su presidente, Michael O'Leary, por esquirolaje empresarial.