El asesinato de un coronel pone a prueba una vez más el proceso de paz de Colombia con las FARC
- En el ataque con explosivos han muerto tres personas
- Las FARC han incrementado su actividad armada desde el pasado 22 de mayo
- Suspendieron el alto el fuego unilateral tras la muerte de 27 guerrilleros
El proceso de paz del Gobierno colombiano con las FARC ha sido puesto a prueba nuevamente este sábado por el atentado con explosivos atribuido a esa guerrilla que le ha costado la vida a un teniente coronel de la Policía, un policía y un civil en el suroeste del país, cerca de la frontera con Ecuador.
Las FARC han incrementado su actividad armada desde el pasado 22 de mayo, cuando suspendieron el alto el fuego unilateral.
En el atentado, que según las autoridades ha sido cometido por guerrilleros del frente 48 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en una carretera entre los municipios de Córdoba e Ipiales, en el departamento de Nariño, ha muerto el comandante de la Policía de esta última localidad, el teniente coronel Alfredo Ruiz Clavijo; el policía Juan David Marmolejo García y un civil.
Este ataque, uno de los más graves sufridos por la Policía desde que se iniciaron los diálogos de paz con las FARC, en noviembre de 2012 en Cuba, se produce en medio de una ofensiva terrorista de esa guerrilla que aumenta día tras día y justo cuando el presidente Juan Manuel Santos está fuera del país, de gira por Europa, recabando apoyo internacional para una solución negociada al conflicto.
El director de la Policía, general Rodolfo Palomino. ha detallado que "de acuerdo con lo que hemos podido conocer de la información de un policía sobreviviente de este cruel y cobarde atentado, el señor teniente coronel y el patrullero asesinado fueron ultimados por tiros de gracia".
Uribe pide la suspensión de las negociaciones
El teniente coronel asesinado, de 49 años de edad, 30 de ellos en la Policía, regresaba a Ipiales, el principal puesto fronterizo de Colombia con Ecuador, después de encabezar un consejo de seguridad en la cercana localidad de Puerres.
El expresidente y senador Álvaro Uribe ha sido uno de los primeros en condenar el ataque fue crítico de la manera como se desarrollan los diálogos en Cuba, quien de inmediato ha propuesto que se suspendan las negociaciones de paz: "Hay momentos, el asesinato del soldado es el asesinato de la Patria. Que se suspenda el diálogo sin levantar la mesa" ha solicitado Uribe en su cuenta de Twitter.
El presidente Santos, que tras asistir en Bruselas a la cumbre de la Unión Europea y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) se ha trasladado a Italia, no se ha manifestado aún sobre el atentado pero sí lo hicieron varios de sus ministros.
Y es que el atentado que le costó la vida al teniente coronel no hace sino aumentar la tensión del debilitado proceso de paz, golpeado a diario en las últimas semanas por las acciones terroristas de las FARC contra la fuerza pública, la infraestructura petrolera, energética, de carreteras y de agua potable del país.
Incremento de violencia
En su ofensiva, las FARC dejaron sin electricidad durante varios días a más de un millón de personas en el departamento del Caquetá (sur), así como a las ciudades de Buenaventura y Tumaco, los principales puertos del país en el Pacífico, y contaminado ríos y otras fuentes de agua con derrames de petróleo en los departamentos de Putumayo y Nariño.
También dinamitaron la semana pasada el acueducto del municipio de Algeciras, en el departamento del Huila (sur), atacaron infraestructuras petroleras en Tibú (Norte de Santander), localidad limítrofe con Venezuela, y este mismo viernes han atentado contra dos torres de transmisión de energía en Medina, departamento de Cundinamarca, a menos de 200 kilómetros de Bogotá.
En otro ataque en la Vía Panamericana, en el departamento del Cauca, murieron este jueves tres policías de carreteras.
Las FARC han incrementado su actividad armada desde el pasado 22 de mayo, cuando suspendieron el alto el fuego unilateral e indefinido que habían iniciado cinco meses antes en el marco de los diálogos de paz, después de que 27 guerrilleros murieran en un bombardeo de la Fuerza Aérea en una zona remota del Cauca.
Negociaciones en La Habana
Ese bombardeo fue a su vez consecuencia de un ataque de las FARC que mató a 11 militares en la misma región el 15 de abril, día en que empezó la actual prueba de fuego para el proceso de paz.
A pesar de este aumento de violencia, en la última ronda de negociaciones cerrada en La Habana el 4 de junio, las partes pactaron la creación de una Comisión de la Verdad, una vez firmado un acuerdo definitivo de paz.
La Comisión, según informaron en La Habana representantes de Cuba y Noruega, países garantes del proceso, será un mecanismo "independiente e imparcial de carácter extrajudicial".
La guerrilla declaró un alto el fuego unilateral e indefinido el pasado 17 de diciembre