Jeb Bush, hijo y hermano de presidentes, anuncia oficialmente su candidatura a la Casa Blanca
- Jeb Bush es hermano de George W. Bush e hijo de George H. W. Bush
- El republicano domina el español y apuesta por una reforma migratoria
- El exgobernador de Florida se presenta como un hombre pragmático
Descendiente de una de las sagas familiares que más poder ha acumulado en Estados Unidos, el republicano Jeb Bush, hermano de George W. Bush e hijo de George H. W. Bush, de talante moderado, larga experiencia y palabra tranquila, hizo este lunes oficial su candidatura a las primarias con el objetivo de llegar a la Casa Blanca.
El exgobernador de Florida (1999-2007), en cuyo logo de campaña ha desaparecido el apellido "Bush" para destacar simplemente "Jeb 2016", ha realizado el anuncio en Miami donde ha asegurado que está listo para "tomar el mando" ante el "mal curso" que ha tomado el país.
Nacido en Texas en 1953, John Ellis 'Jeb' Bush parte en la contienda con la ventaja de dominar el español y tener una esposa mexicana, Columba Garnica, dos activos que le dan un gran ascendente sobre la comunidad hispana, que se suma a su apariencia de hombre razonable y pragmático.
Trayectoria política y experiencia empresarial
El candidato republicano presenta tanto su trayectoria política como su experiencia empresarial como avales. Así, ha asegurado que es el más cualificado para "arreglar" los problemas económicos porque, ha argumentado, "ya lo he hecho antes" como gobernador de Florida.
Bush, cuya política en Florida se caracterizó por el equilibrio económico y las privatizaciones, ha expresado su confianza en lograr un crecimiento económico del 4 % y crear 19 millones de nuevos puestos de trabajo. Además ha explicado que, de ser elegido presidente, utilizará el "poder del veto" para "proteger a los contribuyentes de los gastos innecesarios".
En su presentación ante cerca de 3.000 seguidores en el Miami Dade College, una de las universidades públicas más grandes del país, Bush ha criticado la política exterior del presidente Barack Obama hacia Cuba y el acercamiento diplomático con Irán. Según el candidato, Obama "está dejando un legado de crisis no contenidas, violencia sin oposición, enemigos sin nombre y amigos indefensos". Si consigue llegar al Despacho Oval, reconstruirá la "alianza vital" con Israel y devolverá la confianza a las fuerzas armadas estadounidenses.
También ha arremetido contra los grupos de poder de Washington, ciudad que ha definido como una "capital estática" frente a una "nación dinámica" que apuesta por la libre empresa. Además, se ha mostrado muy descontento con "lo que han hecho organismos federales como el Servicio de Impuestos Internos (IRS), la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y una "completa burocracia" traducida en un "exceso de regulación".
"El candidato de los hispanos"
Bush no ha desaprovechado tampoco la oportunidad para presentarse como el candidato presidencial de los hispanos, a los que se dirigió en español, mediado el discurso, para pedirles ayuda y que "trabajen con nosotros por los valores que compartimos y por un gran futuro".
Defiende una reforma migratoria integral que regularice a los 11 millones de inmigrantes indocumentados que viven en Estados Unidos: "somos una nación de inmigrantes. Este no es el momento de abandonar algo que nos hace especial y único como país".
En un tono más moderado, ha arremetido también contra el nuevo sistema sanitario del presidente, conocido como Obamacare, pero también ha reconocido que su partido debe proponer una "alternativa" a la población más desfavorecida que no puede pagar un seguro de salud.
Contrario al uso medicinal de la marihuana, no ha eludido tampoco el debate sobre el matrimonio homosexual, y aunque defiende el enlace "tradicional" entre hombre y mujer, se ha mostrado siempre respetuoso con la unión de parejas del mismo sexo.
Jeb Bush es uno de los candidatos favoritos entre los republicanos aunque las encuestas de los principales medios del país lo sitúan en empate técnico junto al senador por Florida Marco Rubio y al gobernador de Wisconsin, Scott Walker, quien todavía no ha formalizado sus aspiraciones.