El juez solicita a Brasil interrogar como imputado al comisario que mató presuntamente a su mujer

• También pide a las autoridades brasileñas una copia de la autopsia
• La Audiencia Nacional dejó sin efecto la primera citación que hizo Velasco
• La hija del comisario y de la víctima ha presentado una querella contra él

El comisario español Jesús Figón recibe la medalla de servicios excepcionales de manos del presidente de Costa Rica, Abel Pacheco.

El juez Eloy Velasco ha solicitado este miércoles a las autoridades brasileñas poder tomar declaración en septiembre como imputado al comisario español de policía Jesús Figón, exconsejero de Interior de la embajada española en Brasil, que mató presuntamente a su mujer y después fue puesto en libertad tras haber declarado a la Policía que actuó en defensa propia.

Después de que la Audiencia Nacional anulara este martes la citación que Velasco había hecho al comisario para el próximo 30 de junio, al entender que lo había hecho fuera de los cauces establecidos en el Convenio de Cooperación entre ambos países, el juez ha acordado librar una comisión rogatoria a Brasil para se le permita comparecer en su juzgado el próximo 9 de septiembre para ser interrogado.

En la misma providencia en la que Velasco cursa esa comisión rogatoria, reclama a las autoridades brasileñas una copia del informe médico-forense de la autopsia practicada al cadáver de la fallecida, Rosemary J. L., "en el que se detalle las causas de la muerte, así como informe fotográfico de las lesiones producidas, tanto ofensivas como defensivas".

El magistrado también pide además a las autoridades brasileñas que se le remita copia del atestado policial.

La Audiencia deja sin efecto la primera citación

La sección tercera de la Sala de lo Penal acordó este martes dejar sin efecto la primera citación que hizo Velasco al comisario para el 30 de junio, así como la petición de repatriación a España del cadáver de la mujer, al entender que se había acordado al margen de los cauces oficiales.

Pese a reconocer la competencia de la justicia española en este caso, al cumplir con los requisitos contemplados en la ley de justicia universal -el autor de la muerte es español y la agraviada (la hija) ha interpuesto querella en España -, la Sala consideró la existencia de "una preferencia a favor de las autoridades judiciales brasileñas" para enjuiciar estos hechos, al haberse iniciado allí una investigación.

Figón, de 64 años, trabajaba como consejero de Interior de la embajada española en Brasil cuando mató a su mujer, Rosemary J.L., de 50 años.

El comisario aseguró que fue en defensa propia

Se entregó a las autoridades brasileñas el 12 de mayo y fue puesto en libertad tras confesar el asesinato, tras lo que le fue retirada la inmunidad diplomática.

Figón y su mujer estaban juntos desde hacía treinta años, cuando se conocieron en España, y tenían una hija en común, la que el pasado 13 de mayo presentó la querella contra su padre.

La versión que el comisario ofreció a la Policía brasileña, según difundieron varios medios de comunicación del país, es que la fallecida, que sufría depresión por la pérdida de un hijo, se le acercó con un cuchillo durante una discusión antes de que él la matara con esa misma arma.