Grecia rechaza la prórroga de cinco meses ofrecida por las instituciones porque exige medidas recesivas
- Señala que la financiación que se lograría sería "completamente insuficiente"
- Los acreedores prorrogarían el segundo rescate y aportarían 15.500 millones
Grecia ha rechazado la prórroga de cinco meses ofrecida por las instituciones al considerar que exige adoptar "nuevas medidas que provocarían una fuerte recesión" como condición para lograr una financiación "completamente insuficiente".
"El Gobierno griego no tiene ni el mandato popular ni el derecho moral para firmar un nuevo rescate", han afirmado fuentes del Ejecutivo. "Si el Gobierno y el Parlamento aprobaran esta propuesta, los ciudadanos y los mercados entenderían que se acerca un periodo de cinco meses de recesión, lo que conduciría a otra negociación en condiciones de crisis".
Además, el Gobierno ha anunciado que la propuesta de Atenas para que el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) asumiera las obligaciones de Grecia con el Banco Central Europeo (BCE) ha sido rechazada.
Las instituciones proponen a Grecia prorrogar el segundo rescate a cambio de recibir unos 15.500 millones de euros que le permitiesen hacer frente a sus obligaciones financieras con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el BCE.
"Esta cantidad de dinero es insuficiente" pues ni siquiera prevé el desembolso de los 7.200 millones pendientes del rescate, cuando el Estado griego, en cambio, ha cumplido todas sus obligaciones con los acreedores, especialmente con el FMI, han dicho las fuentes griegas.
Todo ello, han subrayado, "sin haber recibido ni un solo euro" del rescate pendiente. La propuesta "no prevé ni siquiera un mínimo de liquidez del que pueda disponer el Estado griego".
Mientras que la hoja de ruta que Grecia presentó el jueves a sus socios del Eurogrupo se acerca un poco más al documento defendido por las instituciones acreedoras en cuestiones como el IVA o el Impuesto de Sociedades, pero mantiene diferencias en los apartados de pensiones y gasto de Defensa.
Además, las fuentes han recalcado que el Ejecutivo de Alexis Tsipras presentó "una propuesta lógica para reestructurar la deuda y resolver el problema de liquidez" y cita el ejemplo de la transferencia de la deuda desde el BCE al MEDE.