Juncker pide a los griegos que voten 'sí' para que su mensaje sea que Grecia quiere seguir en Europa
- Francia y Alemania instan a Atenas a volver a las negociaciones
- Hollande: "Francia no tiene nada que temer sobre lo que pueda suceder"
- El ministro español de Economía dice que aún hay tiempo para dialogar
- En Bruselas hay dudas de que Grecia pueda seguir en la eurozona
El pueblo griego debe votar que sí a las propuestas de las instituciones acreedoras para enviar el mensaje de que quieren seguir en Europa. Así ha resumido este lunes el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, la encrucijada abierta en Grecia por la convocatoria por parte del Gobierno de Alexis Tsipras de un referéndum sobre la última oferta de la propia Comisión, el BCE y el FMI.
Juncker ha admitido que los griegos "tienen todo el derecho a opinar", pero ha advertido que para hacerlo "debe conocer toda la verdad" y que su Gobierno debe contársela, "sin simplificar con una campaña a favor del 'no'". Además, ha reiterado que "la puerta sigue abierta" para cerrar un acuerdo entre Grecia y sus acreedores.
Durante su comparecencia ante la prensa en Bruselas, el presidente del Ejecutivo comunitario ha destacado que la institución que lidera siempre ha negociado según "el más puro espíritu europeo, basado en las reglas y la confianza mutua, y nunca en términos de ultimátums", tratando de desmentir con ello las acusaciones de Atenas, que habla de que el proceso de negociaciones se limitaba a "lo tomas o lo dejas".
Así, Juncker ha asegurado que, aunque se trata de "un paquete exigente", la propuesta que estaba sobre la mesa cuando el Gobierno griego decidió dejar las negociaciones no contiene recortes de salarios ni de pensiones.
Aunque sí ha admitido que contiene "algunas medidas fiscales a corto plazo", ha valorado también que reduzca en 12.000 millones de euros el ahorro para los próximos dos años exigido en un principio a Atenas. "Es un paquete que busca mayor justicia social, mayor crecimiento y una administración pública más moderna y eficiente", ha defendido.
"Todos los elementos para el acuerdo estaban sobre la mesa"
También ha asegurado que él y el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, habían comunicado a las autoridades griegas que habría nuevos desembolsos que les ayudarían a cumplir sus pagos de deuda y que se aplicarían los compromisos sobre la reestructuración de la deuda firmados en 2012, así como posibilidades de ejecutar un intercambio de bonos griegos.
Esas posibilidades figurarían en un documento adjunto a las propuestas presentadas el viernes por los acreedores.
Hay que recordar que, en público, los dirigentes de los Estados miembros del euro habían asegurado hasta el mismo sábado que el alivio de la deuda no se había abordado en ningún momento y la canciller alemana había insistido en que no habría más dinero "nuevo" para Grecia.
Sin embargo, según Juncker, "todos los elementos para un acuerdo integral estaban sobre la mesa" antes de la reunión del Eurogrupo del sábado pasado, y con ellos, "se podría haber logrado el acuerdo de forma sencilla". Por ese motivo, ha explicado, no va a hacer "ninguna nueva propuesta" y se limita a "describir" las que están sobre la mesa.
Mientras tanto, se suceden las reuniones de urgencia en París, Berlín, Madrid y otras capitales europeas ante el nuevo escenario de la crisis griega. En el primer día de corralito en Grecia, tras el fracaso de las negociaciones entre Atenas y los acreedores, los líderes europeos llaman a volver al diálogo y se preparan para una eventual salida del país griego de la eurozona.
Dudas sobre la continuidad de Grecia en el euro
Así, el comisario europeo para la Agenda Digital, el alemán Günther Oëttinger, ha expresado este lunes sus dudas de que Grecia pueda permanecer en la eurozona y ha subrayado que Alemania hará todo lo posible por evitar posibles consecuencias para los demás socios europeos.
"Queremos, si es posible, mantener a Grecia en la eurozona, pero es más que dudoso que se pueda lograr", ha declarado Oëttinger en Berlín, antes de una reunión de la dirección de la Unión Cristiano Demócrata (CDU) de la canciller, Angela Merkel.
Justo después de reunirse con los líderes de todos los partidos alemanes en la Cancillería para analizar la evolución de la crisis griega, la propia canciller Merkel ha insistido en que la oferta de las instituciones acreedoras a Grecia es "muy generosa".
"Nuestra oferta generosa era nuestro aporte al compromiso, hay que hacer constar que del lado griego no había disposición al compromiso", ha agregado. "Hay que buscar compromisos, nadie puede obtener el ciento por ciento", ha avisado Merkel en una comparecencia ante la prensa junto al vicecanciller, Sigmar Gabriel.
Merkel: "Si fracasa el euro, fracasa Europa"
Merkel ha subrayado que uno de los principios básicos de la UE es el de intercambiar "solidaridad a cambio de responsabilidad" y ha rechazado la posibilidad de abandonar esas bases a corto plazo ante la crisis griega, porque Europa saldría perjudicada. "Hay que luchar por esos principios; podríamos tal vez abandonarlos a corto plazo, decir sencillamente 'cedamos', pero a medio y largo plazo nos perjudicaríamos" al perder relevancia en el mundo. "Si fracasa el euro, fracasa Europa", ha recalcado la canciller.
Por otra parte, su vicecanciller y ministro de Economía, Sigmar Gabriel, ha señalado que Alemania está dispuesto a retomar las negociaciones si el domingo gana el "sí" en el referéndum.
"Si vence el 'no', será una clara decisión en contra de la permanencia en la eurozona", ha subrayado Gabriel en rueda de prensa junto a Merkel, quien ante la claridad de Gabriel, ha querido dejar claro que Berlín "no quiere influir de ninguna manera" en los ciudadanos griegos ni decir lo que tiene que hacer ese pueblo, aunque ha reiterado que su obligación es hablar de las consecuencias que puede tener su decisión.
Sin embargo, la canciller alemana también ha descartado la posibilidad de que se pueda negociar con Atenas una línea de financiación puente si se retoman las negociaciones, porque "no hay ninguna base legal" para hacerlo.
Europa dice estar más preparada que hace cuatro años
Por su parte, el presidente de Francia, François Hollande, ha dicho que estará "siempre disponible" para dialogar y ha subrayado que respeta la decisión "soberana" del Gobierno heleno de someter a referéndum el próximo 5 de julio las medidas propuestas por los acreedores internacionales.
"Lo que está en juego es algo fundamental, saber si los griegos quieren quedarse en la zona euro, que es su lugar, en mi opinión, aunque les corresponde a ellos decidir, o si toman el riesgo de salir", ha señalado en una breve comparecencia ante la prensa.
Además, ante las alarmas por un contagio de la crisis al resto de países europeos, Hollande ha afirmado que su país está mucho más preparado que en la anterior crisis.
"Hoy la economía francesa es robusta, mucho más robusta que hace cuatro años, y no tiene nada que temer sobre lo que pueda suceder. (Francia) no actúa por miedo a lo que pueda pasar, sino porque es su responsabilidad", ha indicado tras haber celebrado en el Elíseo un Consejo de Ministros restringido para analizar la situación.
Sin embargo, las Bolsas han acusado el arrastre de un fin de semana nefasto para la moneda común. Los principales bancos europeos han sufrido caídas superiores a los seis puntos porcentuales en algunos casos tras la imposición en la noche del domingo de las restricciones de movimientos de capitales para para evitar que continúe la retirada masiva de efectivo iniciada el viernes.
En España, uno de los países que más teme el contagio de la situación en Grecia, el ministro de Economía también ha dicho que la situación se afronta aquí con "solvencia y serenidad".
"Todavía hay tiempo para negociar, pero hay que hacerlo con las reglas que nos hemos dado entre todos", ha dicho Luis de Guindos, quien ha comparecido en rueda de prensa con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Grecia es parte de la zona euro y "todos deseamos que siga siendo así", ha añadido.
También preocupa la situación en Grecia al presidente de EE.UU., Barack Obama, que ha mantenido una conversación telefónica con Hollande para reiterar la importancia de que los acreedores y Atenas sigan en la mesa de negociación.