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El FMI confirma el impago de Grecia y declara al país "en mora"

  • El plazo dado a Grecia para pagar venció este martes 30 de junio
  • El Gobierno griego ha pedido un aplazamiento del pago y el Fondo lo analizará
  • Grecia es el primer país desarrollado que impaga al FMI en toda su historia

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Imagen de la fachada de la sede del FMI en Washington, con el letrero del nombre de la entidad.
Imagen de la fachada de la sede del FMI en Washington.

El plazo marcado a Grecia para pagar 1.500 millones de euros al Fondo Monetario Internacional (FMI) ha expirado esta medianoche, con lo que ha entrado en estado de mora ante el organismo internacional. Al mismo tiempo, en un proceso paralelo, también ha terminado la prórroga del rescate del país, concedida en febrero para tratar de lograr un acuerdo con Atenas sobre las reformas y ajustes que debía aplicar para recibir los fondos que quedaban pendientes de ese programa.

Al combinarse el impago al Fondo y el final del rescate, el país queda al borde del abismo de la quiebra y podría verse abocado a su salida del euro, un paso que Atenas se niega a aceptar y que podría intentar bloquear mediante su recurso al Tribunal de Justicia de la UE.

"Grecia está ahora en mora y sólo puede volver a recibir fondos una vez que los atrasos hayan sido cumplidos", ha indicado Gerry Rice, portavoz del organismo en un breve comunicado. Como consecuencia del impago, y de acuerdo con la normativa interna del FMI, Grecia queda de manera automática impedida de acceder a fondos adicionales por parte de la institución internacional.

Este mismo martes, 30 de junio, día del vencimiento, el viceprimer ministro griego, Yanis Dragasakis, ha solicitado al organismo aplazar al mes de noviembre el pago del préstamo. "Existe la posibilidad de pagar al FMI más tarde", ha dicho Dragasakis en una entrevista en la televisión pública de su país. El objetivo de esta solicitud es evitar que el impago de la deuda agrave la situación financiera de Grecia, ya crítica.

Petición de aplazar el reembolso hasta noviembre

Para ello, Atenas ha planteado la posibilidad de recurrir a una disposición del FMI que permite a un Estado miembro y sin voto pedir el aplazamiento del reembolso de la deuda en un plazo de tres a cinco años, que corresponde con la vida de sus préstamos. Esta posibilidad la han usado sólo dos países hasta el momento, Nicaragua y Guyana, y a la vez que un alivio para Grecia podría servir para que el FMI evite dañar la credibilidad de sus futuros planes de ayuda.

El FMI ha confirmado que la recepción de una petición de las autoridades griegas para la extensión del plazo de pago, "que pasará al Directorio Ejecutivo siguiendo los cauces debidos" para que ser analizada.

La falta de pago convierte a Grecia en el primer país desarrollado que impaga al FMI en sus siete décadas de historia. El último país que había incurrido en una suspensión de pagos de gran magnitud con el organismo internacional fue Zimbabue, en 2001.

La ruptura entre el FMI y Grecia se consuma así después del cruce de declaraciones de las últimas semanas, cuando el primer ministro heleno, Alexis Tsipras, acusó al Fondo de tener una responsabilidad "criminal" en la ruina económica de su país. La directora gerente del Fondo, Christine Lagarde, replicó que las conversaciones entre Atenas y sus acreedores sólo podrían solucionarse si había "adultos" en la sala.

También ha expirado el rescate

Además, este martes también ha vencido el segundo programa de rescate de Grecia.  Atenas ha realizado una petición de último minuto para que esa ayuda se sustituyera por otro programa, un tercer rescate de dos años de duración y 30.000 millones de euros en fondos con los que afrontar los vencimientos del período, y una reestructuración de la deuda pendiente. A cambio de la nueva ayuda, Atenas aseguraba que habría algunas concesiones en pensiones y mercado laboral, pero no especificaba cuáles ni de qué calado.

Este plan es una petición a los socios para firmar "un préstamo de dos años con el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), una reestructuración de la deuda con el Fondo de Estabilidad Financiera (FEEF) y una breve prórroga" del rescate que expiraba este martes, según las explicaciones de Dragasakis en la televisión pública helena.

Pero los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro rechazaron esa petición y anunciaron una nueva vídeoconferencia para analizar la situación este miércoles.

Además, este miércoles el consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE) debe decidir si mantiene la liquidez de emergencia proporcionada a la banca helena desde finales de enero. El vice primer ministro también ha explicado que el Banco de Grecia ha solicitado al BCE aumentar el techo de estos créditos -situados actualmente en torno a los 90.000 millones de euros-.

Sin esa liquidez, los bancos griegos se pararían y eso llevaría al colapso a todo el sistema de pagos del país, haciendo imposible el abono de salarios, pensiones y otras deudas, y entrando por tanto en una completa suspensión de pagos.

¿Qué ocurrirá tras el impago de Grecia?

Sobre el referéndum convocado el próximo domingo para que los griegos decidan si aceptan o no las propuestas de los acreedores, el número dos de Tsipras, Yannis Dragasakis, ha insinuado que, si se alcanzase un acuerdo con las instituciones, el Gobierno podría cancelar la celebración de la consulta.

"Es posible que el Gobierno decida otra cosa, se trata de un tema político, lo convocamos para obtener un acuerdo, como parte de la propia negociación", ha señalado Dragasakis, que ha considerado que esa decisión "no gustó, porque los socios están acostumbrados a que les digan siempre que sí".