Una enmienda a la directiva europea de derechos de autor abre la puerta a la 'tasa Google'
- El PPE propone a la Comisión que preserve la calidad del periodismo
- La eurodiputada Julia Reda teme que se coarte la libertad de enlazar
- La nueva Ley de Propiedad Intelectual española incluye una compensación a editores
La reforma de la directiva de derechos de autor de la Unión Europea (la 2001/29/EC) que se vota el jueves 9 de junio en el Europarlamento se enfrenta a un nuevo obstáculo.
Una enmienda presentada por la eurodiputada del Partido Popular Europeo (EPP), la alemana Angelika Niebler, abre la puerta a establecer una 'tasa Google' en Europa. Es decir, se podría llegar a establecer un pago a los agregadores de contenido por enlazar a artículos de noticias si se aprueba y la Comisión Europea atiende la solicitud del texto.
Es un camino similar al que recorrió España durante la tramitación y aprobación de la nueva Ley de Propiedad Intelectual, y que finalmente incluyó el apodado canon AEDE.
Consiste en que los agregadores de contenidos -Google es el más conocido- deben abonar a los editores una compensación equitativa por el uso sin autorización de fragmentos no significativos de contenidos generados por los medios de comunicación.
Libertad de enlace vs derechos exclusivos
La autora del borrador de la reforma, la eurodiputada por el Partido Pirata Europeo en el grupo de Los Verdes, Julia Reda, ha alertado en su blog de que "la libertad del enlace está en juego" en caso de adoptarse la enmienda de Niebler.
Así, la eurodiputada del EPP propone añadir un nuevo apartado, el 57a: "Pide a la Comisión que evalúe y presente una propuesta sobre cómo se puede preservar la calidad del periodismo, incluso en la era digital, con el fin de garantizar el pluralismo de los medios, en particular teniendo en cuenta el importante papel que juegan los periodistas, autores y los medios de comunicación, así como los editores de prensa editores respecto a las mismos".
El borrador de Reda contemplaba desde un primer momento que se dé la libertad de enlazar y que los enlaces no estén sujetos a derechos exclusivos, amparándose en que la comunicación no se realiza a un público nuevo (artículo 15)
Asimismo, el Comité de Asuntos Legales del Parlamento Europeo aprobó el pasado mes de junio el informe de Reda con su propuesta de la libertad de enlace, a pesar, denuncia la eurodiputada, de que hubo un intento por parte de Niebler".
Reda insiste en que esta propuesta es "un ataque a uno de los fundamentos de la comunicación online: la libertad de enlace" y critica el intento de imponer un precio al enlace a sus noticias para paliar que "muchos editores de papel han dejado de innovar y crear modelos de negocio sostenibles para el periodismo online".
Antecedentes de la compensación por enlazar
El caso más reciente de imponer una compensación por enlazar e incluir fragmentos de noticias en agregadores lo tenemos en España, donde la nueva Ley de Propiedad Intelectual incluye la obligación de los agregadores de contenidos de pagar una compensación a los editores de noticias.
La inminente entrada en vigor de la ley, el 1 de enero de 2015, provocó que el servicio de noticias de Google, News, cerrara en España unos días antes.
En abril la compañía de Mountain View anunciaba que había llegado a un acuerdo con editores europeos, a los que tiene previsto destinar 150 millones de euros en tres años para proyectos de innovación en periodismo digital.
En España los beneficiarios son El País (Prisa), Unidad Editorial, Vocento, Grupo Godó -estos grupos son miembros de Aede, la asociación que estaba a favor de incluir la tasa en la Ley de Propiedad Intelectual-, Grupo 20minutos -miembro de la Coalición Pro Internet, en contra de la tasa- y El Confidencial.
El caso español estuvo precedido del conflicto en Bélgica, que llegó a los tribunales y diversos medios del país no aparecieron en el buscador hasta finales de 2012; en Francia Google creó un fondo de 60 millones similar al de nuestro país, para favorecer la innovación en prensa y en Alemania, aunque aprobó una medida parecida al canon AEDE, los medios acabaron por autorizar a Google a usar sus contenidos en 2013.