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Condenado a cinco años y cinco meses de prisión por agredir y retener a su expareja

  • La mujer permaneció atada a un sofá durante ocho días
  • Las agresiones la provocaron hematomas y la pérdida de piezas dentales
  • El agresor tenía una orden de alejamiento en vigor
  • El 016 es el número gratuito para víctimas de violencia de género

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La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a un hombre a cinco años y cinco meses de cárcel por violencia de género
La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a un hombre a cinco años y cinco meses de cárcel por violencia de género

La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a cinco años y cinco meses de cárcel a un hombre por propinar varias palizas a su expareja y retenerla en un sofá atada con cuerdas durante ocho días.

El tribunal ha condenado al acusado por un delito continuado de quebrantamiento de condena, dos de lesiones y uno de detención ilegal. Además de la pena privativa de libertad, el condenado no podrá aproximarse o comunicarse con su excompañera sentimental durante nueve años y tendrá que indemnizarla por daños morales con 6.000 euros.

Ocho días retenida contra su voluntad

A.P.J., de 64 años, llamó a su expareja el 28 de febrero de 2014 y la convenció para que fuera a su domicilio "a cuidarlo porque estaba enfermo". La mujer accedió pese a que tenía una orden de alejamiento en vigor por malos tratos y permaneció en la vivienda por su propia voluntad hasta el tres de marzo.

Tras una discusión, el hombre le propinó a la mujer una paliza que le ocasionó la "pérdida de piezas dentales" y la ató "con cuerdas a un sofá, dejándola inmovilizada en dicha situación y vigilada constantemente".

La mujer pudo liberarse el once de marzo cuando él salió con ella a la calle para "acompañarla" a que hablase con su abogado sobre el juicio por violencia de género que tenían pendiente.

Las agresiones ocasionaron a la víctima numerosos hematomas y la rotura parcial de dos piezas dentarias, por lo que precisó asistencia médica y tratamiento odontológico. Pese a ello, le ha quedado como secuela un deterioro estético moderado. Estuvo 20 días en recuperación, de los que siete permaneció incapacitada.

Insultos y palizas continuas

El agresor ha reconocido los hechos en el juicio y se ha beneficiado de una rebaja de la pena impuesta por la fiscal, ya que solicitaba para el acusado once años de cárcel. El ministerio fiscal ha tenido en cuenta el atenuante de trastorno psíquico, debido a que el hombre presentó un cuadro de "deterioro cognitivo crónico, progresivo e invalidante".

Durante los ochos días que la mujer estuvo retenida contra su voluntad fue sometida a continuos insultos y agresiones físicas. El auto relata que uno de los días, la víctima "estaba intentado coger el teléfono móvil mientras él estaba descansando", al darse cuenta comenzó a "darle puñetazos y patadas por el cuerpo, la cogió del cuello, la lanzó contra el suelo, golpeándose esta los dientes contra la losa".

El tribunal insiste que, durante "todos esos días", el acusado la mantuvo vigilada "constantemente sin permitir que saliera del domicilio" y que, durante el encierro recibió brutales palizas.

El teléfono gratuito para denunciar situaciones de violencia de género es el 016.