Grecia y los acreedores inician las conversaciones para negociar el tercer rescate
- "Las instituciones están en conversaciones con las autoridades griegas", afirma Bruselas
- Mientras, Atenas comunica que las negociaciones a nivel técnico comenzarán este martes
Los acreedores y las autoridades griegas ya "están en conversaciones" para negociar las condiciones del tercer rescate, después de que se retrasara el arranque formal de los contactos unos días por razones logísticas, ha señalado una portavoz comunitaria.
"En estos momentos, los equipos de las instituciones están ya en Atenas y van a iniciar los trabajos de inmediato, mientras hablamos", ha dicho en una rueda de prensa en Bruselas la portavoz comunitaria, Mina Andreeva.
Los representantes de las instituciones desplazados a la capital griega incluyen a parte de los jefes negociadores, aunque no todos, según ha precisado la portavoz, y se espera que los equipos se completen el miércoles a más tardar.
No obstante, el Ministerio de Finanzas de Grecia ha comunicado que las negociaciones a nivel técnico entre Grecia y los acreedores internacionales comenzarán finalmente este martes. El retraso se ha debido a "razones técnicas" y no "políticas" o "diplomáticas", según ha subrayado el Ministerio.
El Parlamento heleno ha tenido que aprobar dos paquetes de reformas y ajustes este mes para cumplir con las exigencias de sus socios del euro, que reclamaron estas medidas preliminares antes de iniciar formalmente las negociaciones del nuevo programa de asistencia financiera.
Una vez que las instituciones han examinado las reformas aprobadas y constatado que el Gobierno de Alexis Tsipras ha cumplido "a tiempo y de manera satisfactoria" estos prerrequisitos, las negociaciones que definirán el Memorando de Entendimiento (MoU) "deben avanzar ahora tan rápido como sea posible", ha indicado Andreeva.
Según ha apuntado el primer ministro griego, Alexis Tsipras, la idea es cerrar el acuerdo antes del 20 de agosto, fecha en la que vence un nuevo pago al BCE por valor de 3.200 millones.
Tsipras hace un llamamiento a preservar la unidad de Syriza
Mientras, Alexis Tsipras ha hecho un llamamiento a preservar la unidad de su partido, el izquierdista Syriza, aunque ha reconocido que existe un problema "real" de enfoque estratégico entre las distintas facciones, y ha apuntado a la convocatoria de un congreso "lo antes posible", como está previsto en los estatutos de Syriza ante tal situación.
Las diferencias en el seno de Syriza quedaron en evidencia tras la votación de los dos primeros paquetes de medidas impuestos por los socios europeos, que se toparon con el rechazo de más de una treintena de diputados del partido.
Según ha dicho el primer ministro de Grecia, la intención del Ejecutivo es ahora llegar a un acuerdo "sostenible" lo antes posible con las instituciones. En su opinión, todavía hay margen para negociar en los campos relativos a "relaciones laborales, aplicación gradual de las medidas sobre los agricultores, medidas equivalentes para el sistema de pensiones y privatizaciones".
La negociación, según fuentes del ministerio de Finanzas, se desarrollará con varios grupos de trabajo en paralelo, que examinarán la situación financiera, los temas de las pensiones, las relaciones laborales, la apertura del mercado de productos, y otros asuntos acordados en la cumbre de la Eurozona el 12 de julio.
El plan B de Varufakis
Por otra parte, la oposición ha reclamado a Tsipras que aclare si tenía conocimiento de los supuestos planes del exministro de Finanzas Yanis Varufakis de crear un sistema de pagos paralelo que sustituiría al euro en caso de necesidad.
La revelación realizada este fin de semana por el diario Kathimerini ha llevado a 24 diputados de Nueva Democracia a exigir a Tsipras que diga si tenía conocimiento de los detalles de este plan, si había sido aprobado por él y qué iniciativas tiene previsto tomar para investigarlo.
La información, confirmada parcialmente por el propio Varufakis, apunta a que el exministro proponía piratear la web de la Secretaría General de Ingresos Públicos con la idea de apropiarse de todos los números de identificación fiscal de los contribuyentes y empresas.
En una conversación con representantes de varios fondos de riesgo, que fue grabada bajo consentimiento de Varufakis y cuyo contenido ha desvelado Kathimerini, el entonces ministro afirmó que esta Secretaría General está plenamente bajo control de la troika.
El plan contemplaba que en paralelo al pirateo, se hubieran creado cuentas secretas para todos los ciudadanos y empresas, asignadas cada una a su NIF correspondiente, de forma que "de la noche a la mañana" el Estado hubiera podido estar en condiciones de hacer transferencias digitales mediante el procedimiento de pagarés.
Varufakis en declaraciones al diario británico Daily Telegraph, ha dicho que el primer ministro nunca le dio permiso para activar el plan.