Científicos resuelven el enigma de la formación de anillos alrededor de los planetas
- Los anillos de Saturno consisten en partículas de hielo de diferentes tamaños
- Un estudio muestra que esa distribución tiene un carácter universal
- Los científicos apuntan que es probable que existan anillos planetarios más allá del Sistema Solar
Un estudio elaborado por un equipo internacional de científicos ha resuelto un enigma científico tras descubrir que los anillos planetarios, como los que rodean Saturno, tienen una distribución de partículas universalmente similar.
El autor principal del trabajo, el profesor Brilliantov de la Universidad de Leicester, ha explicado que los anillos de Saturno están relativamente bien estudiados y se sabe que consisten en partículas de hielo de diferentes tamaños, con una alta probabilidad de que estas partículas sean restos de algún suceso catastrófico lejano.
"Lo que es sorprendente es que la abundancia relativa de partículas de diferentes tamaños sigue, con una alta precisión, una ley matemática 'de cubos inversos'", ha explicado. Es decir, la abundancia de partículas de 2 metros de tamaño es 8 veces más pequeña que la abundancia de partículas de un metro, mientras que la abundancia de partículas de 3 metros es 27 veces más pequeña, y así sucesivamente.
Esto es válido hasta el tamaño de unos 10 metros, luego sigue una caída abrupta en la abundancia de partículas. La razón de esta drástico cambio, así como la naturaleza de la increíble ley de cubos inversos, ha seguido siendo un enigma hasta ahora.
"Por fin hemos resuelto el enigma de la distribución del tamaño de partículas. En particular, nuestro estudio muestra que la distribución observada no es peculiar de los anillos de Saturno, sino que tiene un carácter universal", ha recordado el científico.
La mayoría de los planetas del Sistema Solar tienen cuerpos más pequeños, o satélites, que orbitan un planeta. Algunos de ellos, como Saturno, Júpiter, Urano y Neptuno, además, poseen anillos planetarios - una colección de cuerpos aún más pequeños de diferentes tamaños que también orbitan un planeta. Los científicos apuntan que es probable que también existan anillos planetarios más allá del Sistema Solar.