Tsipras confía en cerrar pronto el tercer rescate y la CE ve "realista" que sea antes del 20 de agosto

• El 20 de agosto Grecia debe hacer frente a nuevos vencimientos con el BCE
• El BCE mantiene el techo de liquidez de emergencia para la banca helena
• Los ingresos fiscales y del turismo han evolucionado favorablemente

El primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras.

El primer ministro griego, Alexis Tsipras, ha dicho que pronto habrá un acuerdo con las instituciones para un tercer programa de rescate, aunque ha reconocido que se tratará de un pacto "espinoso". "Este acuerdo tiene políticas que no hemos elegido y que nos vemos obligados a llevar a la práctica", ha dicho.

En este mismo sentido se pronunció este martes la Comisión Europea (CE) que calificó de "ambiciosa, pero realista" la perspectiva de que los acreedores y Atenas logren cerrar un acuerdo antes del 20 de agosto, fecha en la que Grecia debe hacer frente a nuevos vencimientos con el Banco Central Europeo (BCE).

"Si todo el mundo se atiene a los compromisos del 12 de Julio, el acuerdo es posible para permitir un primer desembolso del nuevo programa a tiempo para el pago que Grecia debe hacer el 20 de agosto", indicaron fuentes comunitarias.

Mientras, el ministro de Finanzas de Grecia, Euclidis Tsakalotos, aseguró este martes que las negociaciones con los acreedores internacionales concluirán esta semana, mejorando así la previsión de una portavoz gubernamental que, horas antes, estimó que el acuerdo llegaría antes del 18 de agosto.

En cualquier caso, desde el Ejecutivo comunitario subrayaron que para que el acuerdo sea efectivo, también deberá superar el voto de varios parlamentos nacionales, entre ellos el griego y el alemán.

Grecia quiere mejorar las condiciones para los agricultores

En otro orden de cosas, Tsipras, que ha visitado este miércoles el ministerio de Agricultura, Medio Ambiente y Energía, ha dicho que una vez alcanzado el compromiso con los socios, el Gobierno seguirá negociando para conseguir mejores condiciones, especialmente para los agricultores.

Así, Tsipras ha prometido sacar adelante un programa de incentivos que sirva para proteger el sector hasta 2020, y que ayudaría a crear hasta 50.000 puestos de trabajo. Ha concretado que el proyecto gubernamental contempla una diferenciación clara entre aquellos que tienen ingresos rurales pero no son principalmente agricultores, y los que viven plenamente del campo.

Por ello, ha abogado porque los profesionales que viven solo de la agricultura puedan seguir obteniendo un trato fiscal favorable manteniendo su impuesto sobre la renta en el 13%, y aplicar asimismo reducciones para los jóvenes agricultores. Mientras que para los demás, el impuesto se elevaría hasta al 26%.

Además, Tsipras se ha comprometido a desmantelar el oligopolio que hay en el mercado agrónomo mediante la racionalización de los precios al productor, los pagos a tiempo y el control los precios de producción vigentes.

El BCE mantiene el techo de liquidez de emergencia para la banca helena

Por otra parte, el BCE ha mantenido sin cambios el techo de liquidez de los créditos de emegencia a los bancos griegos, que se sitúa en torno a 90.400 millones. Fuentes bancarias han señalado que el Banco de Grecia no había solicitado liquidez adicional porque tiene suficientes reservas, debido a que los ingresos fiscales y del turismo, entre otros, han evolucionado favorablemente.

Se calcula que actualmente el colchón de liquidez asciende a unos 5.000 millones "o incluso más", según han señalado las citadas fuentes. La próxima revisión del límite de créditos está prevista para dentro de dos semanas.

La salida masiva de depósitos durante las negociaciones entre Grecia y sus acreedores, así como la imposición de controles de capital, han causado estragos en la banca griega, cuya recapitalización es uno de los pilares del tercer rescate.

Desde que la Bolsa de Atenas reabriera el lunes, los títulos bancarios sufren desplomes diarios. Así, por tercera jornada consecutiva, las acciones del sector bancario han tenido caídas de hasta el 30%, lo que hace que las pérdidas acumuladas superen el 70% en tres jornadas bursátiles.