Una nueva huelga de 24 horas en el metro de Londres colapsa el transporte público
- Se habilitaron 250 autobuses extra para compensar el cierre del metro
- Los empleados exigen un aumento de salario y nuevas contrataciones
La huelga convocada por cuatro sindicatos de trabajadores ferroviarios ha paralizado los servicios del metro de Londres durante 24 horas -desde las 17:30 hora local del miércoles hasta la misma hora del jueves- y ha colapsado en las horas punta el transporte público de la ciudad.
Transport for London (TFL), la empresa que gestiona el transporte en la capital británica, dispuso 250 autobuses adicionales para hacer frente al aumento de la demanda y distribuyó 600 personas por Londres para informar sobre cómo llegar a su destino a los turistas y trabajadores que han optado por caminar o ir en bicicleta.
Sin embargo, los usuarios tuvieron que enfrentarse a colas y saturación de las vías de transporte alternativas. Así, en la Plaza del Parlamento, la más congestionada de todas, los retrasos superaron los 40 minutos a primera hora de la mañana.
Menos atascos que en el paro de julio
Ésta es la segunda huelga en un mes convocada por los sindicatos del metro, después de la realizada el 8 y el 9 de julio.
Según la empresa de navegación por satélite TomTom, a las 7:45 de la mañana había 428 atascos en la ciudad, con 317 kilómetros de retenciones. Esa congestión duplicó a la registrada el jueves de la semana pasada, aunque es más pequeña que la vivida durante la anterior huelga, cuando 1.445 atascos provocaron retenciones de 1.224 kilómetros. La compañía atribuye el menor impacto del paro a la menor densidad de tráfico durante agosto.
Los trabajadores ferroviarios de los sindicatos Unite, los miembros de ASLEF y los de RMT y TSSA se han sumado a esta convocatoria, con más de 130.000 socios en conjunto.
Estos sindicatos manifiestan que la entrada en vigor de trenes nocturnos el próximo 12 de septiembre choca con la conciliación familiar, y exigen un aumento de salario y la contratación de más trabajadores.
El portavoz del sindicato RMT, Mich Cash, ha declarado este jueves que es urgente una reunión con el alcalde de Londres, Boris Johnson. "Es hora de que el alcalde dé la vuelta a esta situación", ha dicho Cash. "La discusión no es sobre el dinero sino sobre el equilibrio de vida laboral y familiar".
"Nos pagan un salario fantástico y la cantidad de días festivos también es buena, pero ¿por qué tienen que forzarme a trabajar noches y más fines de semana cuando eso no es lo que firmé?", ha declarado a la BBC un conductor del metro que ha pedido no identificarse.
Negociaciones atascadas
Por su parte, Metro de Londres ofreció el pasado miércoles pagas compensatorias a los empleados y aseguró que, tras el período de transición, este nuevo turno sería una opción a elegir o no por los trabajadores, que conservan sus días de vacaciones y de descanso, tal y como estaba establecido.
Las negociaciones entre los trabajadores y la dirección se reanudarán la próxima semana.
Según la BBC, los sindicatos han rechazado la última oferta, que incluía un aumento del 2% del salario, un pago extra de 200 libras (283 euros) por cada turno nocturno a los conductores y un bono de 500 libras (710 euros) a los trabajadores de la red cuando dé comienzo el servicio.
El alcalde de Londres, el conservador Boris Johnson, que ha reiterado que no prevé cambiar sus planes para implantar el servicio nocturno, ha acusado a los sindicados de "poner una pistola en la cabeza de los londinenses". Johnson asegura que no está "preocupado" y que puede aplazar su apertura "siempre y cuando ésta tenga lugar en otoño".