Sao Paulo investiga 19 asesinatos detrás de los cuales pueden estar policías

• Un grupo de encapuchados llevó a cabo varias matanzas la noche del jueves
• Los lugares coinciden con el reciente asesinato de agentes por otras bandas

Investigan una serie de asesinatos en Sao Paulo posiblemente perpetrados por policías encubiertos

Las autoridades de Sao Paulo temen una nueva ola de violencia como consecuencia de la muerte de 19 personas en una noche en una serie de incidentes que parecen estar relacionados y cuya autoría apunta a miembros de las fuerzas policiales.

Brasil ha amanecido conmocionado este viernes tras confirmarse la muerte de 19 personas en una decena de tiroteos ocurridos en tres municipios vecinos de la región metropolitana de Sao Paulo y que fueron llevados a cabo por personas encapuchadas.

Los hechos ocurrieron en un lapso de un par de horas en Osasco, Barueri e Itapev, en donde fueron asesinadas, respectivamente, 15, tres y una persona. Además, un total de siete personas resultaron heridas.

Los ataques ocurrieron en un radio corto en una zona en la que confluyen los tres municipios.

Debido a la proximidad de los incidentes, tanto física como temporal, las autoridades trabajan con la hipótesis de que todos los crímenes estén relacionados entre sí, aunque parece que fueron obra de más un comando.

Munición de las fuerzas de seguridad

Además, el hecho de que la Policía que investiga el caso haya encontrado casquillos de armas habitualmente utilizadas por las fuerzas del orden en varios de los lugares donde se produjeron los incidentes, apunta a la posibilidad de que se trate de un ajuste de cuentas por parte de algunos miembros del cuerpo.

"De las seis primeras víctimas identificadas, cinco tenían antecedentes criminales. Estamos analizando si existe una relación entre este hecho y lo sucedido", ha señalado el secretario de seguridad del Estado de Sao Paulo, Alexandre De Moraes.

De Moraes ha mostrado su preocupación porque "la mayor matanza del año" pudiera guardar alguna relación con el homicidio de dos miembros de las fuerzas del orden en esa misma zona a lo largo de esta última semana, ya que de ser así los asesinatos de la pasada noche podrían ser sólo el inicio de una nueva ola de violencia.

Y ha dicho que si existe algún "indicio" de la participación de algún policía en los hechos, se llamará al departamento de asuntos internos.

El pasado miércoles, un guarda municipal fue asesinado en Barueri y la semana pasada un policía militarizado resultó tiroteado cuando se encontraba fuera de servicio, al intentar impedir un robo en una gasolinera de Osasco.

Antecedentes de 'exterminio'

Las muertes evocan otras matanzas, con menor número de víctimas, ocurridas en lo que va del año en otros puntos de la región metropolitana de la mayor ciudad brasileña y que también a apuntan a los llamados grupos de "exterminio" (paramilitares) como sus responsables.

En mayo de 2006, el estado de Sao Paulo sufrió una ola de atentados contra autobuses, policías y comisarías, que dejaron casi 300 muertos, y fueron atribuidos al Primer Comando de la Capital (PCC), uno de los mayores grupos del crimen organizado del país y que opera desde el interior de los presidios paulistas.

Esta misma semana, Amnistía Internacional alertó sobre la violencia en la otra gran ciudad brasileña, Rio de Janeiro. En su informe, a un año de la inauguración de los Juegos Olímpicos, la ONG ponía el foco en que la policía es la responsable del 16% de los homicidios que se cometen en ese estado, y que la mayoría no se investigan.