Londres reabre su embajada en Teherán cuatro años después
- El ministro de Exteriores, Philip Hammond, ha sido el encargado de la reapertura
- La legación fue cerrada en 2011 tras el asalto de un grupo de estudiantes
El Reino Unido ha reabierto este domingo su embajada en Teherán cuatro años después de su cierre, en lo que supone un paso histórico en la normalización de las relaciones entre la República Islámica y Occidente.
Según informa la agencia Reuters, el ministro británico de Exteriores, Philip Hammond, ha sido el encargado de declarar la apertura y ha izado la Union Jack -bandera británica- en el jardín de la residencia del siglo XIX de la capital iraní donde se ubica la legación y que fue asaltada por un grupo de estudiantes islámicos en 2011.
El jefe de la diplomática británica, que ha acudido acompañado de una numerosa delegación de diplomáticos y empresarios, ha reabierto la embajada nada más llegar a Irán, mientras decenas de periodistas y numerosos policías aguardaban espectantes la aparición de la bandera británica en los jardines del complejo.
Hammond sigue de este modo los pasos de otros ministros italianos, franceses y alemanes y de la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, tras el histórico acuerdo nuclear alcanzado entre las potencias munciales e Irán el pasado 14 de julio.
A su llegada a la capital iraní, Hammond -que es el primer ministro británico en visitar Teherán desde 2003-, aseguró en Twitter que era "un momento histórico en las relaciones entre Irán y Reino Unido".
Previamente, aseguró que el acuerdo nuclear y la elección de Hassan Rohani como presidente habían sido "hitos importantes" en las relaciones entra ambos países.
El regreso de los británicos, bien recibido por la población iraní en general, ha sido duramente criticada sin embargo por los sectores más radicales del régimen islámico, que durante los últimos días han subrayado en los medios de comunicación lo "peligroso" que resulta para Irán aceptar de vuelta a un país "que tiene una historia muy negra" respecto a la República Islámica.
Durante su estancia en Teherán, el ministro británico de Exteriores también mantendrá encuentros con el propio Rohani, con su homólogo iraní, Mohamed Yavad Zarif, con el presidente del Parlamento, Alí Lariyaní, y con otras autoridades.
Asalto violento
El cierre de la embajada británica se produjo tras el asalto que protagonizó un grupo de estudiantes islámicos el 29 de noviembre de 2011, que protestaban por las sanciones impuestas por Londres a Irán por su programa nuclear.
Los asaltantes entraron en las dependencias, incendiaron vehículos y mobiliario y saquearon abundante documentación. Además, retuvieron durante varias horas a seis miembros de la legación, que posteriormente fueron liberados.
Un día después, el Gobierno británico respondió cerrando la embajada e instando a los diplomáticos iraníes a abandonar el Reino Unido.
Las relaciones entre Londres y Teherán empezaron a descongelarse en diciembre de 2013, tras la visita de un diplomático británico a la República Islámica, una situación que fue mejorando progresivamente con la elección Rohani.
Los vínculos entre los Gobiernos de ambos países han sido tormentosos en el pasado, con episodios como el cierre durante 9 años de la embajada en Teherán en 1979, a raíz de la revolución islámica; el asalto a la embajada iraní en Londres en 1980; la fatua contra el escritor anglo-indio Salman Rushdie y la detención de miembros de la Marina británica en Irán en 2007 acusados de traspasar aguas territoriales.