La NASA pone a prueba el paracaídas de la nave con la que espera llegar a Marte en 2030

• La NASA trataba de experimentar qué pasaría si falla el sistema
• Uno de los paracaídas no desplegó y la nave aterrizó del revés

Cápsula de Orion en un viaje de prueba

La NASA ha probado este miércoles el sistema de paracaídas de Orion, la nave con la que espera que el primer hombre llegue a Marte en 2030, con una réplica de esta en el desierto de Arizona, en Estados Unidos.

Durante la prueba, un avión C-17 dejó caer la réplica de Orion, que tiene una masa muy similar a la nave auténtica, desde una altitud de más de 10.000 kilómetros sobre el desierto de Arizona. Uno de los tres paracaídas que se encargan de estabilizar a la cápsula no se desplegó, por lo que no consiguieron frenarlo y esta aterrizó del revés.

Simulacro en el desierto

Los ingenieros al cargo del simulacro aseguraron que trataban de comprobar qué sucedería en caso de que fallara alguno de los paracaídas que controlan el aterrizaje de Orion. "Probamos los paracaídas de los extremos para asegurarnos que tenemos un sistema seguro para traer de vuelta a la Tierra a tripulaciones desde Marte en vuelos futuros, incluso si algo sale mal", ha explicado CJ Johnson, director del proyecto de prueba del sistema de paracaídas de Orion.

El sistema consta de un total de 11 paracaídas. Los tres principales, que se han puesto a prueba este miércoles y que son los más grandes con unas dimensiones como las de un campo de fútbol, se abren cuando la cápsula está a unos 2,5 kilómtros del suelo. Además, Orion tiene otros dos paracaídas, más pequeños, que también se encargan de frenar y estabilizar la cápsula. Tres más, diseñados para proteger el compartimento donde viaja la tripulación. El sistema también cuenta con tres paracaídas de emergencia.

Este simulacro forma parte de una conjunto de pruebas para evaluar la seguridad de los tripulantes a bordo de la nave en condiciones extremas y garantizar su regreso a la Tierra.