Los ministros de la UE se reunirán el 14 de septiembre para abordar la crisis migratoria
- Tratarán la política de devoluciones y medidas de cooperación internacional
- Se intentará crear un listado de países de origen y un registro de inmigrantes
- Merkel pide una rápida expulsión de los solicitantes que son rechazados
- Francia espera que Hungría desmantele la valla de 175 km instalada en la frontera
Los ministros de Interior y de Justicia de los países de la Unión Europea se reunirán de emergencia el próximo 14 de septiembre en Bruselas para abordar la crisis migratoria. EL anuncio se ha realizado en una semana en la que 71 inmigrantes han muerto en un camión y tres menores que viajaban en una furgoneta fueron rescatados e ingresados graves por deshidratación.
La reunión será "con el fin de evaluar la situación sobre el terreno, las acciones políticas en curso y para discutir nuevas iniciativas encaminadas a fortalecer la respuesta europea", por lo que "el ministro de Luxemburgo para la Inmigración y Asilo, Jean Asselborn ha decidido organizar un Consejo de Justicia e Interior extraordinarios", ha expuesto Luxemburgo, que ostenta la presidencia rotativa de la Unión Europea, en un comunicado.
“La situación del fenómeno migratorio fuera y dentro de la UE ha adquirido recientemente proporciones sin precedentes“
"La situación del fenómeno migratorio fuera y dentro de la UE ha adquirido recientemente proporciones sin precedentes", ha declarado el Gobierno luxemburgués.
En la reunión, la Agencia de Control de Fronteras Exteriores (Frontex) de la UE y la Oficina Europea de Apoyo al Asilo (EASO) informarán a los ministros comunitarios de los flujos migratorios y a continuación los titulares de Interior y Justicia se centrarán en analizar "la programación del trabajo futuro, en particular la política de devoluciones, la cooperación internacional y las medidas para prevenir el tráfico con migrantes".
Asselborn ha convocado el consejo extraordinario después de que los ministros de Interior de Francia, Alemania y el Reino Unido, Bernard Cazeneuve, Thomas de Maizière y Theresa May, pidieran a la presidencia luxemburguesa de turno en las últimas horas que organice tal reunión en las próximas semanas por la llegada excepcional de inmigrantes y demandantes de asilo a territorio comunitario.
Los ministros reclamaron la cita en menos de dos semanas para poder así "preparar eficazmente las decisiones" del próximo consejo ordinario de Justicia e Interior que se celebrará el 8 y 9 de octubre "y avanzar concretamente en diferentes puntos".
Los representantes de los tres países "subrayaron la necesidad de tomar medidas inmediatas para hacer frente al desafío que constituyen estos flujos migratorios". En particular, destacaron la urgencia de poner en marcha "lo antes posible, como muy tarde antes del fin de año", centros en Italia y Grecia que permitan registrar a los inmigrantes en la base Eurodac e identificar a aquellos con "necesidad manifiesta de protección".
Además, instan a establecer una lista de países de origen seguro para poder completar el régimen común europeo de asilo, proteger a los refugiados y asegurar la efectividad de las devoluciones de los inmigrantes indocumentados a los países de donde provienen.
Asselborn ha asegurado que hasta la celebración del consejo extraordinario el 14 de septiembre él continuará sus visitas y contactos sobre el terreno y preparará la cita en estrecha consulta con sus socios de la UE y las instituciones comunitarias.
Mientras tanto, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, está organizando una reunión especial con los líderes mundiales en Nueva York dedicada a abordar el drama de los refugiados, coincidiendo con la celebración de la Asamblea General de Naciones Unidas.
Se trata de la mayor afluencia migratoria que llega a Europa desde los años 90. Los recientes acontecimientos en Austria, con la muerte por asfixia de 71 personas que viajaban en un camión mientras viajaban hacia Hungría, y otros tres menores que tuvieron que ingresar en estado grave por deshidratación y que fueron encontrados en otra furtoneta en Austria, han desatado todo tipo de reacciones políticas en Europa.
Distinta visión entre los miembros europeos
Antes del anuncio de esta reunión, el ministro de Exteriores francés, Laurent Fabius, ha calificado este domingo de "escandalosa" la actitud de algunos países de Europa del Este ante la crisis migratoria de miles de refugiados, la mayoría sirios, que intentan cruzar las fronteras de forma ilegal huyendo de la guerra. Ha hecho referencia explícita a Hungría.
"Cuando veo cierto número de países de Europa, sobre todo del Este, que no aceptan las cuotas -distribución de los exiliados-. me parece escandaloso", ha dicho en la emisora de radio Europe 1.
Fabius ha deseado que Hungría, que ha levantado una valla en la frontera de 175 kilómetros para frenar la inmigración, la desmantele porque ese muro "no respeta los valores comunes de Europa".
El primer ministro francés, Manuel Valls, ha llamado a sus ciudadanos a recibir y atender a los refugiados políticos y ha señalado que "quienes huyen de la guerra, las persecuciones y la tortura deben ser acogidos" en Francia.
La canciller alemana, Angela Merkel, se ha mostrado a favor de una pronta integración de los refugiados con derecho a permanecer en el país, pero al mismo tiempo ha exigido una rápida expulsión de los solicitantes a los que les es rechazado el asilo.
"Para poder ayudar a los que están en una situación de emergencia tenemos que decirles también a aquellos que no lo están que no se pueden quedar aquí", ha declarado Merkel en Cancillería durante el Día de Puertas Abiertas del Gobierno alemán.
Poco antes, el titular alemán de Interior, Thomas de Maizière, ha advertido de que el país no será capaz de afrontar a largo plazo la actual avalancha de solicitantes de asilo. "A la larga, 800.000 (refugiados) son demasiados", ha declarado el ministro, insistiendo en que el país no puede afrontar una cifra tan alta y destacando la necesidad de buscar soluciones a nivel europeo.
Asimismo, es necesario diferenciar entre inmigrantes económicos y aquellas personas que huyen de crisis y guerras. Con estas últimas, precisó, existe una obligación humanitaria. "El derecho fundamental al asilo no tiene un tope", ha añadido.
Por su parte, Mateo Renzi insiste en que "Europa debe dejar de conmoverse para empezar a moverse", en una entrevista que publica el diario Corriere della Sera. "Las dramáticas imágenes de estos niños asfixiados en el camión y asesinados en las bodegas de las naves nos dicen que Europa debe buscar una estrategia", ha agregado el primer ministro italiano.
Hungría endurece sus medidas contra la inmigración
Todo esto ocurre un día después de que Hungría anunciase que ha completado la instalación de una valla con púas metálicas para impedir la entrada de miles de inmigrantes que acuden a su frontera con Serbia diariamente, según anunció el Ministerio de Defensa.
En esta última semana unos 10.000 inmigrantes han cruzado la frontera entre Hungría y Serbia, en la que hay desplegados un millar de agentes de policía de fronteras y se prevé que otros 2.000 acudan el próximo lunes, según ha comunicado el gobierno.
La próxima semana el país debatirá establecer penas de cárcel de uno a tres años, que podrían extenderse a cinco, por cruzar la frontera de forma ilegal. A su vez, planea utilizar pelotas de goma y gases lacrimógenos en determinados casos.
El proyecto de ley también contempla que la policía podrá entrar en domicilios para buscar inmigrantes ilegales sin el permiso de los propietarios y sin una autorización judicial.
Las crisis de Calais y Macedonia y la tragedia del Mediterráneo
Francia y Reino Unido firmaron el pasado día 20 un acuerdo para hacer frente a la crisis migratoria en Calais (Francia), que incluye la creación de un centro de "mando y control" destinado a "actuar frente a las bandas criminales que intentan traficar con personas en el norte de Francia y a través del canal de la Mancha".
Enlas inmediaciones del túnel de Calais están acampadas alrededor de 5.000 personas, procedentes en su mayoría de países como Siria, Eritrea, Somalia y Afganistán, a la espera de intentar cruzar al Reino Unido a través del canal de la Mancha.
La inmigración también está siendo intensa a través de Macedonia, desde donde unas 44.000 personas han accedido a la Unión Europea en los últimos dos meses. La mayoría son sirios que huyen de la guerra. Declarado el estado de emergencia, la situación ha obligado a las autoridades de este país a abrir la frontera.
Además, en los tres días del fin de semana anterior fueron rescatados casi 5.000 inmigrantes en el Canal de Sicilia en la que fue una de las mayores operaciones de rescate de los últimos meses. Las autoridades habían recibido llamadas de auxilio de 22 embarcaciones diferentes en el Mediterráneo.
En lo que va de año son más de 110.000 los inmigrantes llegados a Italia por el Mediterráneo. De éstos, 89.000 aún están en instalaciones de acogida del país.