El déficit del Estado hasta julio se sitúa en el 2,44% del PIB, un 17% menos respecto a un año antes

• La cifra es superior a la de junio, cuando el déficit fue del 2,13% del PIB
• Incluye la liquidación definitiva de comunidades y ayuntamientos de 2013
• Aumenta la recaudación por ingresos impositivos, impulsados por el IVA
• Caen sin embargo las cotizaciones sociales respecto al año anterior

Billetes de euro.

El Estado registró un déficit hasta julio de 26.773 millones de euros -equivalente al 2,44% del PIB- en términos de contabilidad nacional, cifra que supone una reducción del 17% respecto al mismo periodo de 2014, cuando fue de 32.268 millones -el 3,05% del PIB-.

El dato se explica, según el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, por el aumento de los ingresos en un 4% hasta los 100.785 millones de euros -gracias sobre todo a la mayor recaudación por impuestos- y un descenso de los gastos en un 1,2% respecto a un año antes, hasta los 127.558 millones.

Los datos del mes de julio, según Hacienda, incluyen la liquidación definitiva del sistema de financiación de las comunidades autónomas y las corporaciones locales correspondientes al ejercicio 2013, que afecta tanto a los ingresos del Estado -por las cantidades que se reciben de las Administraciones Territoriales-, como a los gastos -por las que el Estado les debe transferir-.

En este caso, informa Hacienda, la liquidación del sistema de financiación autonómico del año 2013 ha resultado a favor de las comunidades autónomas por importe de 1.732 millones de euros. Esto signfica que el Estado ha tenido que abonar esa cantidad a repartir entre todas salvo dos -Andalucía y Aragón-, que han tenido que devolver dinero. Por su parte, la liquidación de las entidades locales ha resultado a favor del Estado, que ha recibido de estas corporaciones 524 millones de euros.

El objetivo de déficit de la Administración Central del Estado para este año es del 2,9%. En este sentido cabe destacar que la Administración Central incluye al Estado (el dato conocido este lunes) y a los organismos públicos, cifra que aún se desconoce y que en los últimos meses ha registrado superávit. Por este motivo, no es posible comparar el dato ofrecido por Hacienda este lunes y el objetivo para todo 2015.

Evolución de los ingresos y de los gastos

Por el lado de los ingresos, entre enero y julio de este año los recursos no financieros del Estado ascienden a 100.785 millones de euros, un 4% en tasa interanual en términos de contabilidad nacional.

Esto se debe a la favorable evolución de los ingresos impositivos, que presentan un crecimiento interanual del 5,9%, hasta los 85.856 millones de euros, debido, según Hacienda, "a la mejora de la actividad económica y del empleo".

Los impuestos corrientes sobre la renta y el patrimonio, que incluyen los ingresos por IRPF e Impuesto sobre Sociedades, crecieron un 3,4% hasta julio. Sin embargo, las cotizaciones sociales cayeron un 0,4% en el acumulado del año respecto al mismo período de 2014.

Los impuestos sobre la producción y las importaciones aumentaron un 7,5%, impulsados por el IVA, que registró un crecimiento del 8,1% respecto al año anterior.

Por su parte, en el capítulo de gastos Hacienda aclara que este año se incluyen dos operaciones sin correspondencia en el mismo periodo del 2014: el extracoste por la producción de energía eléctrica en los territorios no peninsulares y la devolución del 25% de la paga extra de 2012.

Las transferencias corrientes entre Administraciones Públicas, que son la partida de mayor volumen representando el 57% de los gastos, disminuyeron un 2,9% interanual, debido fundamentalmente al descenso de las transferencias a los Fondos de la Seguridad Social, que caen un 14,2% por el descenso del 30,8% de las destinadas al Servicio Público de Empleo Estatal, dato este que se explica por la caída de las prestaciones por desempleo.

En la evolución de los empleos corrientes, el gasto por intereses que disminuyó un 0,4% respecto al año anterior por la mejora de las condiciones de financiación. Mientras, subió la remuneración de asalariados un 1,8% y aumentó las prestaciones sociales distintas de las transferencias sociales en especie (4,3%) por el aumento de las pensiones de clases pasivas (3,3%).