Nueva York se pone a los pies de Manolo Blahnik
- El Consejo de Diseñadores de EE.UU. premia al español
- "No tengo percepción del éxito", dice el zapatero.
- Carolina Herrera, Uma Thurman y Anna Wintour acudieron al homenaje
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“Es el primer diseñador de zapatos que se convirtió en una estrella”. Son las palabras de la actriz Uma Thurman que han acompañado a Manolo Blahnik cuando ha recogido el premio concedido por el Consejo de Diseñadores de Nueva York, uno de los más prestigiosos del mundo.
Se reconoce así su trabajo, su talento y su trayectoria. También se premia su dedicación a calzar los sueños de mujeres de todo el mundo, señoras que ven en sus zapatos objetos de deseo, placer, lujo. Lujo español del que Blahnik es embajador.
El diseñador, con la humildad que le caracteriza, dio varias veces las gracias a los invitados al evento al que acudieron compañeros y gentes de la moda como la diseñadora Carolina Herrera, la editora de Vogue USA Anna Wintour y el actor Alec Baldwin.
La humildad como bandera
“No tengo percepción del éxito”, dijo abrumado al saber que era el primer diseñador de calzado en tener esta distinción. “Cada vez que veo a tanta prensa a mi alrededor me parece algo irreal, no me acostumbro a ello. Estoy muy nervioso, este tipo de situaciones me aterran”.
Cuentan que en cuanto pudo, Blahnik huyó de la fiesta y las cámaras. Nunca ha buscado la foto, nunca ha querido protagonismo. No le hace falta, sus zapatos son los más famosos del mundo.
Sus 'manolos' son especiales. Tanto que muchas mujeres los compran para tenerlos guardados y no usarlos. Madonna dijo que llevar sus zapatos producía tanto placer como tener sexo.
Y la serie Sexo en Nueva York los inmortalizó para el gran público a través de su personaje más fashion, Carry Bradshaw. Y es que este canario ha escrito su nombre con letras de oro en la historia de la moda pero también en la historia de la televisión.
A pesar de ello se considera "una especie de animal prehistórico" que, sin embargo, toma el pulso a los cambios de la sociedad. "El mundo cambia pero los gustos son los mismos y una mujer siempre se sentirá elevada en su tacón que le hará cambiar de posición y hacer un gesto teatral que siempre funcionará".
Premio Nacional de Moda
Tiene su centro de operaciones en Londres y desde allí salen pares hacia todos los rincones del planeta. Nueva York es quizá uno de sus puntos calientes pero su corazón sigue anclado en España.
“Me gustan las mujeres españolas, las mediterráneas, quizá no debería decirlo pero es así”, comentaba ruborizado. España también le adora y en 2012 le dieron el Premio Nacional de Diseño y Moda
Ese año destinó la cuantía del galardón a su isla, La Palma, que atravesaba duros momentos herida por los incendios. Un claro ejemplo de su poco divismo y del amor por su tierra.
Nunca coge vacaciones, adora trabajar
Blahnik, que tiene 72 años, no piensa en la retirada. Al contrario. Ahora vuelve con ganas a trabajar en el sector masculino y sale a la calle un libro que ha escrito volcando sus recuerdos a modo de memorias.
Es la vida de un niño que recorría los bosques y jardines de la isla de La Palma para coger lagartos. No quería encerrarlos en jaulas ni terrarios, tan solo deseaba hacerles zapatitos usando los envoltorios de los caramelos.
Una afición que escondía un sueño. Un sueño que se hizo realidad.