El refugiado sirio al que una periodista puso la zancadilla, al llegar a España: "Esto es como andar por el cielo"

• Osama Abdul y dos de sus hijos están ya en el municipio madrileño de Getafe
• Su acogida ha sido gestionada por la escuela de entrenadores de fútbol

El refugiado sirio que fue zancadilleado por una periodista húngara y dos de sus hijos, a su llegada en la medianoche del miércoles a la Estación de Atocha

El refugiado sirio que fue zancadilleado por una periodista húngara cuando huía de la Policía magiar, Osama Abdul Mohsen, ya ha llegado al que será su próximo hogar en la localidad madrileña de Getafe. Junto a él están dos de sus hijos, de 18 y 7 años, el pequeño de ellos es al que llevaba en brazos cuando cayó al suelo por la zancadilla de la reportera. Su viaje a España ha sido posible gracias al empeño del Centro Nacional de Formación de Entrenadores (Cenafe), que ha gestionado su acogida y la de sus hijos.

"Gracias, no sé hablar en español", ha declarado a los periodistas en una escala en la estación de tren de Barcelona Sants, antes de coger un tren hacia Madrid junto a sus dos hijos, el mayor de los cuales, de 18 años, es futbolista. "Estoy feliz, muy feliz. Esto es como andar por el cielo", ha asegurado.

Al llegar a Madrid, la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, ha acompañado a Osama y a sus dos hijos desde la Estación de Atocha hasta el municipio, donde ha manifestado en una rueda de prensa que estos refugiados "fueron tristemente conocidos por la zancadilla de esta periodista, que demostró su estilo xenófobo e intolerante. Pero en Getafe se les prestará toda la atención que sea necesaria".

"Trabajaremos con el Getafe C.F. para que el padre pueda entrenar, ya que tiene experiencia en ello, y el niño pueda jugar en el Getafe C.F., e incluso, quién dice si en un futuro pueda hacerlo en algún otro equipo español", ha agregado.

El director de la escuela de entrenadores CENAFE, Miguel Angel Galán, ha explicado en declaraciones recogidas por Europa Press que las imágenes de la agresión le llegaron "al alma" y que cuando se enteró de que Osama era entrenador rápidamente hizo las gestiones para ayudarle.

Así, ha relatado que fue a través de un alumno suyo nacido en Marruecos como se puso en contacto con él y que, en sólo dos días, han conseguido que tanto Abdul como sus hijos hayan viajado desde Alemania hasta París, para después desplazarse a Barcelona y coger un tren hasta Madrid. En los próximos días, confían en que su mujer y sus otros dos hijos, todavía en Turquía, puedan también llegar a España.

Osama Abdul Mohsen junto a sus dos hijos a su llegada a Barcelona, acompañados por un ciudadano marroquí que conoce el idioma de los refugiados. Quique García