Acusan de homicidio al comisario español que confesó haber matado a su esposa en Brasil

• Los responsables de la investigación rechazan la alegación de "legítima defensa"
• Jesús Figón era el responsable de seguridad de la embajada en Brasilia
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El comisario español Jesús Figón recibe la medalla de servicios excepcionales de manos del presidente de Costa Rica, Abel Pacheco.

Las autoridades brasileñas han acusado formalmente de homicidio al comisario de policía español Jesús Figón que en mayo pasado se entregó a la Policía y confesó haber matado a su mujer, de nacionalidad brasileña cuando era responsable de seguridad de la embajada española en Brasil , según han informado fuentes judiciales.

Los responsables de la investigación sobre la muerte de Rosemary J.L., esposa de Figón, rechazaron la alegación de "legítima defensa" esgrimida por el policía, según han señalado fuentes de la Policía Civil de Vitoria, capital del estado de Espírito Santo.

El caso se sigue en esa ciudad del sureste de Brasil, donde el pasado 12 de mayo Figón se presentó voluntariamente a las autoridades policiales y fue puesto en libertad después de confesar que había matado a su esposa en defensa propia, según él, durante una discusión conyugal.

La mujer falleció en un apartamento del matrimonio en esa ciudad por múltiples heridas causadas por un arma blanca.

Jesús Figón llevaba dos años y ocho meses en Brasil cuando se produjeron los hechos e iba a ser relevado de su cargo en la embajada.

El comisario, de 64 años, solicitó ser juzgado en su país, pero la Audiencia Nacional española dejó el caso en manos de las autoridades brasileñas.

La sección tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional consideró el pasado junio que había una "preferencia a favor de las autoridades judiciales brasileñas" para enjuiciar los hechos, al haberse iniciado allí una investigación, aunque al mismo tiempo reconocía la competencia de la justicia española en el caso al cumplir los requisitos contemplados en la ley de justicia universal.