Prisión en Francia para los presuntos jefes de ETA David Pla e Iratxe Sorzabal
- El juez galo les imputa seis cargos, entre ellos el de dirección de una organización terrorista
- Otro de los cuatro detenidos en la operación del martes contra ETA también ingresará en prisión
Los jueces antiterroristas franceses han ordenado este domingo el ingreso en prisión de Iratxe Sorzabal y David Pla, considerados por España como los jefes de ETA, y les imputaron formalmente por seis cargos, entre ellos el de dirección de una organización terrorista, informa a Efe una fuente judicial.
El juez de las libertades y la detención, que en Francia es el encargado de decretar el envío a la cárcel de los arrestados, dictó auto de prisión contra tres de los cuatro detenidos en la operación del pasado martes contra la cúpula de ETA en una casa rural de Saint Etienne de Baigorry, en el País Vasco francés.
Un cuarto detenido, cuya identidad no ha sido revelada por la fuente, ha pedido un plazo adicional para preparar su defensa, y su caso será examinado el próximo miércoles, fecha hasta la que permanecerá en prisión.
Junto a Sorzabal y Pla fueron arrestados en la llamada operación Pardines el antiguo responsable del aparato internacional de ETA Ramón Sagarzazu y el dueño del caserío donde se produjo el encuentro, el ciudadano francés Pantxo Flores.
Tenían armas cuando los arrestaron
La Fiscalía francesa acusó ayer a Pla y Sorzábal de "dirección de una organización creada para preparar atentados contra personas con fines terroristas", y pidió ante el juez de instrucción su encarcelamiento.
También presentó los cargos, todos confirmados en la imputación, de "receptación de financiación del terrorismo, posesión de armas y munición, porte y transporte de armas y municiones, receptación de armas y municiones provenientes de un robo a mano armada, y posesión de documentos administrativos falsificados", todo ello dentro de una "banda organizada con fines terroristas".
Sagarzazu y Flores fueron acusados de "asociación de malhechores con fines terroristas".
Sorzábal (43 años) y Pla (40 años) tenían sendas pistolas cuando fueron capturados en Agorerreka, el caserío de Flores, donde también se encontraron documentos de identidad falsos.