La reforma constitucional del PSOE no definirá a Cataluña como nación ni incluirá "privilegios fiscales"
- Sánchez dice que en la Constitución caben nuevas normas de convivencia
- El PSOE llevará en su programa de las generales el modelo federal
- Los socialistas no apoyarán "bajo ningún concepto" la investidura de Mas
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, avanzó este martes que en la propuesta de la reforma de la Constitución en la que están trabajando "no va a aparecer" el término nación ni "privilegios fiscales" para ningún territorio de España.
Sánchez, en una entrevista en Antena 3 recogida por Servimedia, aseguró que "no va a aparecer" el término nación y por tanto el reconocimiento como tal a Cataluña, e insistió en que "la nominación es importante, pero más importante es la convivencia" y solucionar el "problema" que existe en la sociedad catalana.
El líder socialista subrayó que "España es una nación plural, diversa, e indivisible" y que "dentro de ella" se pueden reconocer "singularidades" de algunos territorios pero siempre partiendo de los principios de unidad de la soberanía nacional, igualdad de todos los españoles y reconocimiento del estado federal.
A este respecto, señaló que en dicha propuesta de reforma en la que trabaja el PSOE para exponer al resto de formaciones no habrá "privilegios fiscales" para unas regiones frente a otras.
Este martes, el secretario general de los socialistas se reunirá con los 'barones' territoriales en el marco del Consejo de Política Federal del PSOE para aunar una postura sobre Cataluña tras el triunfo de la lista independentista en las elecciones autonómicas.
La reforma tiene como límite la unidad de España
Sánchez ha apuntado que la propuesta de revisión de la Carta Magna que su partido incluirá en el programa de las generales será "la misma" que la Declaración de Granada aprobada en 2013, en la que el PSOE apostaba por que España pasara del modelo autonómico al federal.
También se recoge en este documento la reforma del Senado, la delimitación de las competencias del Estado y de las comunidades autónomas, así como el reconocimiento de las singularidades de determinados territorios.
La reforma constitucional del PSOE, ha explicado Sánchez, tiene como "límites la unidad España, la igualdad entre españoles y resolver las muchas disfunciones del modelo autonómico".
Relación con Ciudadanos
Por otra parte, Pedro Sánchez también se mostró tajante a la hora de señalar que el PSOE "bajo ningún concepto" apoyará la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat.
Preguntado por si Mas debería dimitir, Sánchez dijo que van a "invitarle a que se vaya" porque ha "fracasado" en su anhelo independentista en las pasadas elecciones y porque durante estos años se ha dedicado a "esconder su desgobierno detrás de la bandera del independentismo".
Por otra parte, ante las posibles conversaciones para formación de Gobierno entre la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, y el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, Sánchez señaló que es "Iceta quien tiene que hablar con Inés y que se entiendan ellos".
A este respecto añadió que Iceta tiene "el liderazgo y el reconocimiento de la organización y social y lo fundamental, tiene la solución" para "tender los puentes" que requiere la "fracturada" sociedad catalana.
“La formación de Rivera es una derecha con las que nos podemos entender“
Reconoció que se mensajea con el líder de C s, Albert Rivera, y que el acuerdo de Ciudadanos y PSOE en Andalucía "No está yendo mal". Si bien, remarcó que el dirigente socialista es "un gran candidato" porque tiene la solución para una "sociedad dividida en dos bloques muy parejos" como son el del independentismo y el del inmovilismo.
Preguntado a nivel nacional sobre un futuro acuerdo tras la elecciones generales y por sus continuos 'guiños' con Ciudadanos, Sánchez señaló que la formación de Albert Rivera es un una "derecha con la que nos podemos entender" y que para él es "importante que dos partidos de centro izquierda y de centro derecha puedan entenderse".
En esta línea, y tras descartar por completo pacto alguno con el PP, señaló que al Partido Popular le ha salido en Ciudadanos un "competidor" y que debería "hacérselo mirar".
El líder del PSOE reiteró que los socialistas están siempre en las soluciones y no en los frentes, por lo que se mostró, hasta por dos ocasiones, de acuerdo con el expresidente del Gobierno José María Aznar en que el Ejecutivo de Mariano Rajoy "no ha dado la batalla en Cataluña".
Si bien, discrepó en las "herramientas" porque, a su juicio, Aznar propone la "confrontación" mientras los socialistas apuestan por el diálogo y la negociación siempre dentro de la legalidad y la Constitución. "No hay un partido político ni un Gobierno más débil sobre Cataluña que el actual", concluyó Rajoy tras subrayar que le reprocha a Rajoy que "no haya sabido ver" que el "problema" en Cataluña también lo era de España.