Enlaces accesibilidad

Una serie de atentados con coches bomba deja más de medio centenar de muertos en Irak

  • Los ataques coinciden con la reapertura parcial de la 'zona verde' de Bagdad
  • El ataque más grave, con 35 muertos, ha tenido lugar en un mercado de Jalis
  • Otro atentado en un mercado cerca de Basora ha dejado diez fallecidos más
  • Una tercera explosión en las afueras de Bagdad causa al menos 12 muertes

Por
Control en la entrada de la 'zona verde' de Bagdad, reabierta parcialmente tras doce años
Control en la entrada de la 'zona verde' de Bagdad, el área fortificada de la capital, que ha sido reabierta parcialmente tras doce años.

Irak ha sufrido este lunes una serie de atentados con coche bomba que han dejado más de medio centenar de muertos y decenas de heridos, justo el día en que las autoridades reabrían la zona verde de Bagdad, el perímetro fortificado en el centro de la capital que alberga las sedes del Gobierno y el Parlamento iraquíes, así como las embajadas occidentales, que llevaba cerrada desde 2003.

El primero de los ataques ha tenido lugar en un atestado mercado de la ciudad de Jalis, a unos 80 kilómetros al noreste de Bagdad, donde la explosión de un coche bomba ha matado a al menos 35 personas y ha herido a otras 40 personas más, según la policía local.

El conductor rogó a la policía que le dejaran aparcar su vehículo para poder comprar medicinas

"El conductor rogó a la policía que le dejaran aparcar su vehículo para poder comprar medicinas en una farmacia cerca y cinco minutos después [la bomba] explotó", ha explicado el capitán de policía Mohamed al Tamimi en declaraciones a Reuters. El estallido, además, ha causado daños materiales graves en los locales comerciales y en los vehículos aparcados cerca del lugar del atentado.

Otro atentado ha acabado con la vida de otras diez personas y ha herido a otras 24, en este caso en el mercado la ciudad de Al Zubair, a unos 15 kilómetros de Basora, en el sur del país. Los ataques con coche bomba son raros en esta zona, predominantemente chií y de defícil acceso para los grupos yihadistas suníes, que son quienes habitualmente utilizan este método en el norte de Irak y en Bagdad.

De hecho, el Estado Islámico en un mensaje difundido a través de las redes sociales y recogido por AFP: "El ejército del califato ha conseguido hacer estallar un coche bomba en una multitud de Rafidha", término que el grupo terrorista utiliza para referirse a los chíies.

Por último, un tercer coche bomba ha estallado en el distrito de Husseiniya, en las afueras de Bagdad, y ha matado al menos a otras 12 personas, según fuentes médicas y policiales citadas por Reuters.

Una celebración amarga

Los atentados han empañado la reapertura parcial de la zona verde de Bagdad, cerrada durante 12 años, que los bagdadíes esperaban como símbolo de la recuperación de cierta normalidad pese a los constantes ataques terroristas y de la cruenta guerra contra los yihadistas del EI, que ha proclamado un califato en las zonas de Irak y Siria que están bajo su control.

Siento una gran satisfacción al cruzar esta área de la que tanto escuchamos hablar y que no podíamos pisar

Uno de los ciudadanos que se ha beneficiado de la medida es Ahmed al Yaburi, que ha entrado con su coche en la zona por uno de los accesos abiertos. "Siento una gran satisfacción al cruzar esta área de la que tanto escuchamos hablar y que no podíamos pisar, pese a que está ubicada en el centro de nuestra capital", ha contado Al Yaburi a Efe.

Los bagdadíes hacen cola para entrar en la 'zona verde', reabierta tras 12 años

Los bagdadíes hacen cola para entrar en la 'zona verde', el área fortificada de Bagad, reabierta tras 12 años. EFE

En ese sentido, ha subrayado que esta medida "va a aliviar los atascos de tráfico que afectan a Bagdad". Sin embargo, para otros vecinos como Haidar Abdel Amir, este paso es insuficiente, en parte, porque la reapertura no ha sido completa, ya que solo se ha abierto una entrada y muchas calles en su interior siguen vetadas al tráfico.

Pedimos que toda la zona verde sea reabierta y que se ofrezca seguridad a toda la capital

"Pedimos que toda la zona verde sea reabierta y que se ofrezca seguridad a toda la capital. El señor (primer ministro Haidar) Al Abadi debe hacer de Bagdad, y de todo Irak, una zona verde y segura para todos", ha comentado. Asimismo, ha recordado que hay muchos barrios de la capital con "zonas verdes" para proteger la sede de cada partido político y residencias de los responsables iraquíes. "Por ello, exigimos que las autoridades retiren los bloques de hormigón armado que han cortado la comunicación entre los barrios y han desfigurado la imagen de la capital", ha concluido.

Según explicó este domingo Al Abadi durante la reapertura, esta medida, anunciada en agosto, se produce "en respuesta a las demandas populares y para poner fin a las limitaciones de movimiento de la población". Con el objetivo de proteger a los ciudadanos en esa área, el Gobierno iraquí ha desplegado a sus fuerzas por la zona.

La zona verde, que tiene una superficie de alrededor de 10 kilómetros cuadrados, recibe su nombre por la denominación que le dieron dieron las tropas estadounidenses después de que ocuparan Bagdad en abril de 2003. Es una de las zonas más fortificadas de Irak, ya que acoge las sedes del Gobierno iraquí, la jefatura del Ejército, la Embajadas de EE.UU. y Reino Unido, y las oficinas centrales de organizaciones y agencias gubernamentales y extranjeras.

Los civiles que deseaban entrar por razones de trabajo debían obtener estrictas autorizaciones de seguridad, tanto por parte de las fuerzas estadounidenses como de las autoridades iraquíes, aunque, a pesar de la extrema protección que le otorgaban los controles y muros de hormigón que la rodean, ha sufrido varios ataques en estos años.