La Audiencia niega excarcelar a un etarra enfermo de sida que rechaza medicarse
- Los jueces destacan que Ibon Iparraguirre puede ser tratado en la cárcel
- Prisiones destaca su "activa participación" como preso de ETA
- El lehendakari Urkullu apoyó su liberación hace días en el Parlamento
La Audiencia Nacional ha negado la excarcelación del etarra enfermo de sida Ibon Iparraguirre, que rechaza medicarse. En el auto al que ha tenido acceso Europa Press, los magistrados recuerdan que Instituciones Penitenciarias se opuso a la excarcelación por la "negativa actitud y evolución" del preso, por su "activa participación" como miembro de ETA en la cárcel y porque su "problemática médica podía ser atendida en el Centro Penitenciario". Los jueces también argumentan que no ha cumplido ni una cuarta parte de su condena.
El propio lehendakari, Íñigo Urkullu, se pronunció el pasado viernes a favor de su liberación por motivos "humanitarios" y señaló que el Gobierno vasco había "intensificado" en los últimos días sus gestiones para "mejorar la situación del recluso" en respuesta a una pregunta de EH Bildu en el Parlamento.
Iparraguirre, condenado por la colocación de un coche bomba en la comisaría de la Ertzaintza de Ondarroa, en Vizcaya, en 2008, cumple condena desde 2010 en la cárcel de Navalcarnero, en Madrid.
El preso etarra había pedido que se le aplicase el mismo artículo del reglamento penitenciario (art. 100.2) que en su día permitió excarcelar a De Juana Chaos tras su huelga de hambre. A la vez Iparraguirre solicitó una suspensión de la condena por motivos de salud, pero tanto Instituciones Penitenciarias como los jueces han desestimado todas sus pretensiones.
Estable pese a la negativa de recibir tratamiento
En el auto en el que la Audiencia Nacional desestima su puesta en libertad, los magistrados señalan que el estado de salud de Iparraguirre fue examinado por el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria que establece la dolencia del preso y el tratamiento adecuado a partir de los informes de los médicos de la cárcel y del Instituto de Medicina Legal de Órganos Judiciales Centrales (IMLOJE).
Estos informes determinan que "el penado presenta un tipo de enfermedad por infección de VIH estadío C3 sin tratamiento por voluntad del paciente". Añaden que a pesar de negarse al tratamiento "se mantiene estable, lo que permite llevar una vida prácticamente normal en el Centro Penitenciario". Por todo ello, rechazan la solicitud de Iparraguirre, resaltando "su negativa al tratamiento".
Fuentes conocedoras de la situación del preso informaron a Europa Press de que Iparraguirre había rechazado el tratamiento habitual contra el sida para seguir un método naturista desaconsejado por especialistas en la materia. Aconsejado por un médico privado de su confianza, decidió apostar por este método homeopático naturista que consiste en no ingerir medicamentos.