Canadá gira a la izquierda con el triunfo de Justin Trudeau y el Partido Liberal
- Los liberales obtienen 184 diputados y alcanzan la mayoría absoluta
- Justin Trudeau será el próximo primer ministro canadiense
- Stephen Harper deja la dirección de los conservadores tras reconocer la derrota
Justin Trudeau se convertirá en el próximo primer ministro de Canadá después de que el Partido Liberal que lidera ganase con mayoría absoluta las elecciones celebradas ayer en el país, lo que le permitirá gobernar en solitario durante los próximos cuatro años.
El Partido Liberal ha obtenido 184 de los 338 escaños de la Cámara Baja del Parlamento. En segundo lugar ha quedado el Partido Conservador del primer ministro saliente, Stephen Harper con 99 escaños. En tercer lugar se ha situado el socialdemócrata Nuevo Partido Democrático (NPD) con 44 diputados.
Harper ha reconocido su derrota poco antes de la medianoche en un discurso que pronunció desde la ciudad de Calgary y en el que felicitó a Trudeau por una amplia victoria que nadie había previsto. El Partido Conservador obtuvo 166 diputados y el 39,6 % de los votos en las elecciones de 2011.
Entre los diputados que han perdido su escaño se encuentran varias figuras controvertidel gabinete de Harper, como su ministro de Finanzas, Joe Oliver; el ministro de Ciudadanía e Inmigración, Chris Alexander, y el secretario del ex primer ministro, Paul Calandra.
Harper, que llegó al poder en 2006, ha reconocido que "el resultado no era lo que esperábamos" y ha dicho que ha ofrecido a Trudeau su "total cooperación" para proceder con la transferencia de poder, lo que normalmente dura entre 10 y 14 días en Canadá.
Trudeau, hijo del exprimer ministro Pierre Trudeau
Este lunes, 26,4 millones de canadienses estaban llamados a votar para elegir los 338 diputados, 30 más que en los anteriores comicios, debido al aumento de la población del país. La amplia victoria de Trudeau, hijo del exprimer ministro Pierre Trudeau, ha sido una sorpresa. A pesar de que los sondeos pronosticaban que sería la primera fuerza del país, la mayoría absoluta parecía lejos.
El Partido Liberal quedó diezmado en las pasadas elecciones, celebradas en 2011, cuando obtuvo el peor resultado de su historia con 34 diputados. Y ahora, ha conseguido darle la vuelta a las encuestas previas a la campaña, que situaban a la formación como tercera fuerza.
El resultado también es un claro rechazo al Partido Conservador y de su líder, Stephen Harper, que ha gobernado Canadá durante 12 años, aunque sólo consiguió mayoría absoluta en las elecciones de 2011.
La economía, en el centro del debate
El ascenso liberal se ha basado en un programa que busca atraer a la clase media con la promesa de elevar los impuestos de los más ricos para reducir la fiscalidad al resto de los canadienses, así como con el compromiso de la construcción de infraestructuras, que supondría un balón de oxígeno para una economía en recesión.
Sin embargo, ese impulso fiscal llevaría en unos tres años a incurrir en déficits presupuestarios, algo que ha criticado Harper, jugando la carta de la estabilidad presupuestaria acompañada de bajadas de impuestos. El conservador ha justificado durante la campaña, además, que la caída de la economía en el primer semestre de este año no se debe a la política de su Ejecutivo, sino a la bajada del precio del petróleo y la ralentización de la economía china.