Robert Peugeot anima a las empresas familiares españoles a cotizar en Bolsa
- El presidente de la compañía de automóviles afirma que mejora la gobernanza
- Advierte del riesgo de que el Volkswagengate se convierta en un diéselgate
Robert Peugeot, presidente y consejero delegado del holding familiar FFP, titular del 14% de las acciones del fabricante de automóviles PSA (Peugeot-Citröen), ha animado a las empresas familiares españolas a cotizar en Bolsa para mejorar su gestión y toma de decisiones.
Peugeot ha sido el conferenciante de la primera jornada del XVII Congreso Nacional de la Empresa Familiar, una reunión que se celebra en Bilbao y ha sido inaugurada por el rey Felipe VI.
El empresario francés ha explicado en este foro la estrategia de diversificación que ha seguido el grupo familiar FFP, que ha pasado de tener, en 2003, el 25% de PSA e inversiones en otras empresas por valor de 225 a millones a ostentar en 2014 el 14% de PSA y más de 2.000 millones en otras empresas de sectores que van del aeronáutico, a los servicios, el lujo o las residencias de ancianos.
Peugeot ha señalado que para poder adoptar ese cambio de estrategia tuvieron, pese a ser una familia bastante reducida, "debates familiares muy animados" entre quienes defendían concentrarse en PSA y los que querían diversificar.
Cotizar en Bolsa mejora la gobernanza
En su opinión, el hecho de que FFP cotizara en Bolsa le dotó de una organización jurídica, con un consejo de administración y con administradores externos, que posibilitó "controlar los debates familiares", pese a la repercusión pública que tuvieron en Francia.
"Cotizar en Bolsa para una empresa familiar puede tener muchas virtudes", sobre todo en la gobernanza, ha destacado el empresario francés.
En cuanto a la situación de PSA, Robert Peugeot ha destacado que los tres accionistas principales desde la dura crisis de 2014 -su familia, el grupo chino Dongfeng y el Estado francés- han empezado "muy bien" y comparten la visión sobre la evolución que debe seguir la empresa.
Riesgo de que el escándalo de Volkswagen salpique a todos los diésel
Respecto al escándalo de la manipulación de los motores diésel por Volkswagen para superar las pruebas de emisiones, ha reconocido el "riesgo innegable" de que el Volkswagengate se convierta en un diéselgate.
En su opinión, al consumidor europeo, el marcado donde más motores diésel se venden, le preocupa el posible valor de reventa que tendrá su coche diésel en unos años, más que las emisiones contaminantes.
Por ello, ha pedido prudencia a los políticos para no generar "rumores" sobre cambios en las exigencias a los motores, cuando la nueva normativa europea actualmente en vigor -frente a la anterior que afecta a los motores de Volkswagen trucados- ya ha reducido las emisiones contaminantes.