El sórdido destino se esconde tras el 'Cabaret de los hombres perdidos'

• El musical narra la historia del ascenso y caída de una estrella
• Se trata del último montaje de los Teatros del Canal
• La obra cuenta con un reparto de lujo dirigido por Víctor Conde

Comienzo del 'Cabaret de los hombres perdidos', en los Teatros del Canal, Madrid

La oscura calma que reina en el Tatooobar, donde se encuentra el Cabaret de los hombres perdidos, está a punto de romperse con la irrupción del joven Dicky. Una persecución y una vida desgraciada le han llevado al lugar adecuado, el sitio donde encontrará su destino.

Cómo imaginar lo que le espera, cuando lo que le prometen allí es un lanzamiento al estrellato (con una carrera nada convencional, Dicky no será una estrella más), la fama, la diversión, el sexo garantizado y, en definitiva, la gloria.

Pero la fama nunca dura demasiado. Por eso, esta es la historia compleja del ascenso y la caída, de los límites humanos y su degradación personal, de la locura, la esperanza y el desamparo. En definitiva, una constante dicotomía entre los extremos que mueven el mundo.

Para ayudar a este pobre desgraciado, otros tres hombres perdidos que conforman este Cabaret, tres hombres fuera de todo convencionalismo, pero que junto con Dicky forman un reparto de lujo.

Durante la obra los protagonistas formarán un peculiar equipo de rodaje noticias

Ignasi Vidal (Javert en Los Miserables, Bestia en La bella y la Bestia) como Destino; Armando Pita (Thenardier en Los Miserables, Lumiere en La bella y la bestia) como Tatuador; Ferran González (Mierda de artista, Pegados) como Lullaby, y Cayetano Fernández (Pluto) como Dicky, protagonizarán el musical, que será dirigido por Víctor Conde (Pegados, Los Miserables, The Hole 2).

Cada uno de los personajes posee su propia belleza, su historia, una personalidad detallada desde el humor y el fracaso, pero compleja y llena de sensibilidad. Eso es lo que hace único al Cabaret de los hombres perdidos, el lugar donde se puede acudir cuando se ha perdido todo.

La historia original se remonta hasta 2006, cuando este transgresor musical se representó por primera vez en el Teatro du Rond-Point de París, y un año más tarde recibió el premio a mejor musical original en la edición Les Musicals y ganó los premios a mejor espectáculo musical y mejor autor en los Premios Molière.

Desde entonces, ha cosechado éxitos en Viena, Varsovia y Buenos Aires, gracias a lo que ganó seis premios Hugo. Ahora, la obra se representará en los Teatros del Canal de Madrid hasta el 8 de noviembre.