El Tribunal Supremo mexicano avala el uso de la marihuana con fines lúdicos
- El Alto Tribunal ha aprobado el cultivo y consumo de marihuana con fines recreativos
- Considera "desproporcionada" su prohibición "en relación con los daños que tiene"
- Cuatro mexicanos pidieron amparo, tras el rechazo de las autoridades sanitarias
El Tribunal Supremo de México ha aprobado el cultivo y consumo de marihuana con fines recreativos a cuatro ciudadanos mexicanos que solicitaron amparo después de que las autoridades sanitarias les negaran dicha posibilidad. El recurso se ha aprobado en una sesión pública por tres votos a favor y uno en contra, el del jurista Jorge Mario Rebolledo, que considera que no especifica dónde se va adquirir la droga, mientras que el quinto integrante de la Sala aún no se ha pronunciado.
El proyecto en el que se reconoce este derecho ha sido elaborado por el propio ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de México, Arturo Zaldívar, quien ha defendido amparar a los cuatro fundadores de SMART, la Sociedad Mexicana de Autoconsumo Responsable y Tolerante, al declarar inconstitucionales cinco artículos de la Ley General de Salud que prohíben actividades relacionadas con el consumo personal de marihuana con fines recreativos, como sembrar, preparar, poseer y transportar.
Durante su intervención, Zaldívar, ha precisado que no ha dicho que "la marihuana sea inocua", sino que su prohibición absoluta en la Ley General de Salud es "desproporcionada en relación con los daños científicamente comprobados que tiene" y ha recordado que la sentencia solo tiene efectos para las cuatro personas que pidieron amparo, que "es exclusivamente para el autoconsumo" y no autoriza actividades de comercio.
Asimismo, el ministro ha precisado que la droga tampoco puede ser consumida "frente a terceros sin su consentimiento".
Este asunto llegó al Supremo debido a un recurso presentado por SMART después de que las autoridades sanitarias negaran un permiso para cultivar, distribuir y consumir marihuana con fines lúdicos o recreativos.
Los promotores del recurso, que buscaban un cambio en la política contra las drogas, argumentaron que la prohibición del consumo personal de marihuana con fines lúdicos y recreativos es contraria al libre desarrollo de la personalidad.