'Lo peor de Maitena', los inicios eróticos de la dibujante argentina

• Un libro rescata sus trabajos de los 80, anteriores a Mujeres alteradas
• Historias en las que la dibujante busca su estilo, y que sorprenden por su erotismo

Fragmento de la portada de 'Lo peor de Maitena'

Todo el mundo conoce a Maitena (Buenos Aires, 1962) por su serie Mujeres alteradas (Lumen), que ha sido traducida a doce lenguas y publicada en más de treinta países. Sus libros han vendido más de dos millones de ejemplares en todo el mundo y ha influido en toda una generación de mujeres dibujantes.

Pero los primeros trabajos de Maitena son muy distintos a los que la hicieron internacionalmente famosa. Y ahora la dibujante los recoge en Lo peor de Maitena (Lumen) un título que contrasta con el de la recopilación de sus mejores trabajos: Lo mejor de Maitena (Lumen).

Portada y página de 'Lo peor de Maitena'

Portada y página de 'Lo peor de Maitena' Lumen

Lo más sorprendente de estos cómics es que muchos son eróticos, ya que a sus 24 años la dibujante colaboraba con revistas como Sex Humor. En Mujeres alteradas Maitena siempre destacó por la naturalidad con la que abordaba el sexo, pero aquí las historias son abiertamente eróticas y algunos dibujos incluso podrían calificarse de pornográficos.

Unos cómics que nos muestran los inicios de una de las dibujantes más influyentes de la historia y que inició una corriente a la que todavía hoy en día se siguen sumando jóvenes autoras.

"Rescato la frescura irreverente y el erotismo de estas páginas"

Viñetas de la serie 'Cora Mina'

Viñetas de la serie 'Cora Mina' Lumen

Casi todas las historias que contiene este libro fueron publicadas entre 1986 y 1990 (cuenado Maitena tenía entre 24 y 31 años) y la dibujante no ha querido reeditarlas hasta ahora por razones que ella misma señala en el prólogo del libro: "Durante mucho tiempo estas páginas me resultaron impresentables, pero no porque fueran sobre sexo sino por cuestiones estilísticas que ya no me preocupan tanto. Hoy rescato la frescura irreverente y el erotismo -algo ingenuo en muchos casos- que las mantienen vivas. Pero sobre todo envidio la pasión con la que fueron hechas, robándole horas a todo y exponiéndome a lo que fuera".

Las historias se publicaron en revistas como Sex Humor, Sex Humor Ilustrado o la mítica Fierro, en las que colaboraron algunos de los mejores dibujantes argentinos de la época. Su primer personaje importante fue Coramina "Era una rubia linda y sensual a la que le pasaban todas las cosas que yo quería que me pasaran a mí" -asegura la dibujante-. Una historieta que destacaba por su sencillez y en la que Maitena todavía intentaba encontrar un estilo propio. Aquí estaba muy influenciada por los encuadres cinematográficos, como confiesa ella misma.

Viñetas de 'La Fiera'

Viñetas de 'La Fiera' Lumen

Pero su personaje más famosos y polémico de esta época fue La Fiera, que Maitena creó para burlarse de los prototipos femeninos y del tipo de humor que hacían sus compañeros varones de la revista: "La Fiera estaba prendida fuego -asegura Maitena- Fea de cara pero buena de cuerpo, salía a buscar sexo a la calle desnuda bajo un impermeable".

Un personaje que usaba a los hombres y que no estuvo exento de polémica. "Dijeron que era ninfómana, misógina, homofóbica y racista, la acusaron de hembrista y a mí de ser igual o peor que los machistas, entre otras cosas por no incluir nunca un personaje masculino como héroe de mis historietas" -comenta la autora-.

En respuesta a esas críticas la historietista creó a su primer personaje masculino, Daniel Fretelli, el Langa. "Lindo, simpático, canchero, el típico muchacho de oficina que se las quiere coger a todas" -asegura Maitena-.

Portada de 'Lo peor de Maitena' y página de la serie 'Langa'

Portada de 'Lo peor de Maitena' y página de la serie 'Langa' Lumen

Sus primeros pasos como historietista seria

Sus historietas eróticas no funcionaban nada mal, pero Maitena tenía un sueño, trabajar para la revista Fierro (una de las más famosas de Argentina) y poder publicar sus trabajos en el extranjero. Un sueño que empezó a conseguir con series como Historias por metro (ambientada en el metro de París para intentar venderla a los franceses) y Barrio chino, con guión de Juan Martini, una historia noir de 45 páginas en las que la propia Maitena confiesa que: "incluía páginas copiando a mis dibujantes favoritos: Hugo Pratt, José Muñoz, Guido Crepaz, Moebius, Milo ManaraLoustal, Max y Angeli".

Aunque algunas de sus páginas se publicaron en revistas europeas como Blue (Francia) o Makoki (España), la crisis del cómic argentino alejó a Maitena de las viñetas para dedicarse a hacer guiones de televisión, "Hasta que me ofrecieron hacer la página de humor de una revista femenina semanal y a partir de ahí mi vida cambió para siempre... y mis historietas también" -asegura-.

Así nació la Maitena que todos conocemos y admiramos, e incluso renegó de estas páginas que ahora vuelven a ver la luz y que tiene un dibujo muy de la época, realmente ochentero. "Durante mucho tiempo estas páginas me resultaron impresentables -confiesa Maitena-, y no por su temática, sino más bien por el dibujo, la dureza del trazo, la deformidad de algunos volúmenes... La soltura que va tomando el trazo vuelve a corroborar que, más allá del talento de cada uno, no hay cosa que no mejore con la práctica".

Lo peor de Maitena es un libro sorprendente porque demuestra hasta que punto Maitena fue pionera en un mundo de hombres, no le tuvo miedo a nada, y su esfuerzo y constancia le llevaron a triunfar con sus Mujeres alteradas.

Maitena dejó de dibujar en 2006 para centrarse en la escritura e incluso acaba de ser abuela, pero ha dejado una huella indeleble en la historia del cómic. Una huella cuyos primeros pasos podemos disfrutar en este sorprendente libro.