Sotheby's pincha en su primera subasta de otoño en la que vende el legado de su propietario

• La Paulette, de Modigliani, logra el precio más alto de la jornada con 38,6 millones
• Obras de Picasso, Degas y Miró se han vendido por debajo de las expectativas
• La subasta continúa este jueves con obras del período azul de Picasso y Monet

Un hombre observa el cuadro 'Paulette Jourdain', de Amedeo Modigliani, que se ha vendido en Nueva York por 38,6 millones de euros.

La obra de Amedeo Modigliani Paulette Jourdain (1919) se ha convertido en la estrella de la primera subasta del legado de Alfred Taubman, fallecido propietario de Sotheby's, al alcanzar los 38,6 millones de euros en Nueva York. Sin embargo, aunque esa obra ha conseguido sobrepasar las estimaciones previas a la sesión, la primera subasta de la temporada de otoño de la casa no ha cumplido las expectativas en las pujas de piezas de maestros como Pablo Picasso, Mark Rothko, Joan Miró o Edgar Degas.

La Paulette de Modigliani, un retrato colorista y de inspiración cubista que muestra a la criada y también amante de su marchante, Lóepold Zborowski, era una de las obras preferidas de Taubman, gran amante de este género, que falleció la pasada primavera a los 90 años. Además, la obra se considera "hermanada" con la Mona Lisa, dado el carisma de ambas mujeres mirando fijamente y con una sonrisa inquietante.

Antes de iniciar la sesión, el encargado de dirigir la subasta, Oliver Barker, ha dicho que una de las penas de Taubman antes de morir era saber que no estaría presente en las pujas por su legado, por lo que se le ha reservado una silla vacía en la sala como homenaje.

Este jueves seguirá la subasta por su legado con, entre otras obras de arte moderno e impresionista, piezas de la pintura claves del período azul de Pablo Picasso, como La Gommeuse -con un precio estimado de 55,2 millones de euros-, y unos Nenúfares de Claude Monet, que podría alcanzar los 46 millones.

Picasso, Degas y Miró no cumplen las expectativas

En cuanto a las previsiones fallidas, cabe destacar la Mujer sentada en una silla (1938), de Picasso. Terminado un año después del Guernika, este retrato de Dora Maar, amante del pintor malagueño, ha sido vendida por debajo de lo esperado. La obra, que según Sotheby's ha ido a parar a la colección privada de la familia del diseñador Gianni Versace, se ha vendido por 18,4 millones de euros cuando el mínimo estimado eran 23 millones.

Algo parecido ha ocurrido con La porte (Objet) (1931), de Joan Miró, y Danseuses en blanc (1878), de Edgar Degas, que se han quedado en los 10,7 y 13,8 millones de precio de martillo frente a las previsiones de entre 14 y 23 para el primer caso y 16,5 millones para el segundo.

Un poco mejor le le ha ido al Retrato de Zacharian (1886), también de Degas, que ha sobrepasado ligeramente el precio estimado con 3,9 millones de euros, aunque esta victoria no compensa el fracaso con la venta del Jardin public à Arles (1888), de Vincent van Gogh, que se quedó en 1,2 millones tras haberse estimado en al menos 1,6 millones.

En cuanto a autores estadounidenses, la presencia en el catálogo de Man with arm raised (1960), una de la más maduras de Francis Beacon que mostraría la imagen de un compañero del artista, ha sido la única dentro de las expectativas al lograr los 8,3 millones de euros. Mientras, las dos obras a subasta del pintor estadounidense de ascendencia letona Mark Rothko, Orange on wine y Lavender and green (1950), que partían destacadas igualmente entre los lotes, no han llegado a lo estimado al venderse por 16,5 y 13,8 millones, respectivamente.