La izquierda portuguesa ratifica el acuerdo para tumbar el gobierno de Passos Coelho
- Los órganos políticos de socialistas y comunistas ratifican el acuerdo político
- Antonio Costa, líder del PS, podrá formar Gobierno si el presidente le designa
- El acuerdo recoge la recuperación paulatina de pensiones y salarios
Los partidos de la izquierda parlamentaria en Portugal (el Partido Socialista, el Comunista, el Bloque de Izquierdas y los Verdes) han cerrado definitivamente el acuerdo para derribar al gobierno del conservador Pedro Passos Coelho y hacer posible un Ejecutivo encabezado por el líder socialista, Antonio Costa.
El acuerdo fue anunciado el viernes pero hasta el domingo no ha sido ratificado por los órganos políticos de comunistas y socialistas.
Entre todos ellos suman la mayoría absoluta necesaria para nombrar primer ministro al socialista Antonio Costa, siempre que el presidente del país, Anibal Cavaco Silva, le llame para formar gobierno.
Gobierno del Partido Socialista
"Están creadas las condiciones para la formación de un Gobierno a iniciativa del PS y con el apoyo parlamentario mayoritario del Parlamento", ha declarado Antonio Costa tras una reunión maratoniana de la dirección del partido, que ha acabado en la madrugada del lunes. La dirección del PS ha aprobado el pacto con 69 votos a favor y 5 en contra.
Desde el PS han insistido en que el acuerdo con las formaciones a su izquierda es firme y garantiza "la formación de un Gobierno socialista con el programa aprobado por la Comisión Nacional, la existencia de condiciones de estabilidad en la perspectiva de toda la legislatura y la existencia de condiciones de gobernabilidad con la apreciación conjunta de los Presupuestos del Estado".
Los socialistas críticos señalan que las tres fuerzas se comprometen únicamente a consultarse para aprobar los Presupuestos, sin dar garantías de su aprobación.
El acuerdo da marcha atrás en algunas de las medidas de austeridad más impopulares del Gobierno de Passos Coelho, pero mantiene el compromiso de reducción del déficit público, según informa desde Lisboa el corresponsal de TVE Iñigo Herráiz.
Estos son algunos de los puntos pactados, según los documentos a los que ha tenido acceso RTVE.es:
- Fin de recortes salariales y de las pensiones, con actualización de estas últimas a partir de enero de 2016. Los funcionarios recuperarán su salario a final de año, mediante devoluciones graduales del dinero que se les ha recortado.
- El salario mínimo aumentará hasta los 600 euros en 2019. En 2016, el valor de referencia será de 530 euros.
- Creación de un grupo de trabajo conjunto para un "Programa Nacional contra la Precariedad".
- Limitación de los contratos temporales.
- Se aumenta la progresividad del impuesto sobre la renta.
- Prohibición de desahucios cuando el valor de las deudas sea inferior al de la vivienda, y suspensión en los demás casos.
- Reducción del IVA a la restauración al 13%.
- Reducción de la tasa de la Seguridad Social para los trabajadores con menos ingresos.
- En Sanidad, reducción de las llamadas "tasas moderadoras", que pagan los portugueses por acceder a algunos servicios médicos, y eliminación de estas tasas cuando el paciente sea enviado a urgencias desde los propios servicios de salud.
- Paralización o reversión de la privatización en transportes, agua y recogida de residuos
En manos de Cavaco Silva
Pese a quedar segundo en las elecciones legislativas del pasado 4 de octubre (con más del 32% de los votos, seis puntos menos que el candidato conservador) Costa, que fue alcalde de Lisboa, tiene opciones de liderar el Ejecutivo gracias a que su rival perdió en las urnas la mayoría absoluta y a la firma de un acuerdo con el BE y el PCP que era inimaginable hace sólo unas semanas.
Para ello, los tres partidos ya anunciaron que votarán el martes a favor de una "moción de rechazo" en el Parlamento contra el actual Gobierno de centro-derecha encabezado por el primer ministro Passos Coelho, que tomó posesión hace apenas diez días, lo que automáticamente provocaría su destitución.
La Constitución portuguesa otorga al jefe del Estado la responsabilidad de elegir a quién encarga la formación de Gobierno. Cavaco Silva debería escoger entre dar el Ejecutivo a los socialistas, dejar a Passos Coelho en funciones hasta la convocatoria de nuevas elecciones (no podrían ser antes de junio de 2016) o apostar por un Gobierno de "iniciativa presidencial", formado por independientes de diferentes tendencias elegidos por él mismo.