Detenidos una quincena de presuntos yihadistas en una operación internacional encabezada por Italia
- La operación ha tenido lugar en Italia, Reino Unido, Alemania, Finlandia y Suiza
- La red tiene relación con el mulá Krekar, pendiente de expulsión en Noruega
- Se trata de una organización integrista kurdo-suní que planeaba atentados
Una operación contra el terrorismo yihadista coordinada por la Unidad de Cooperación Judicial de la Unión Europea (Eurojust) y tras la investigación de los carabineros italianos ha permitido la detención de una quincena personas en Italia, Noruega, Gran Bretaña y Finlandia.
La investigación, bautizada JWeb y realizada por la fiscalía de Roma durante cinco años, ha destacado la "importancia de la actividad terrorista de esta red sobre todo en el teatro de guerra sirio-iraquí en apoyo al Estado islámico", según un comunicado de los carabineros italianos.
Los investigadores y carabineros italianos han explicado que se han emitido 17 órdenes de arresto que han conducido a siete detenciones en Italia, cuatro en Gran Bretaña, tres en Noruega y una en Finlandia, mientras que se busca a otra persona en Suiza y otra está desaparecida en territorio kurdo.
Por su parte, Eurojust ha señaladoen un comunicado que las detenciones han sido en total 13 y que durante el dispositivo policial se han producido registros en 26 locales o establecimientos situados en Italia, Alemania, Finlandia, Noruega y Suiza. Además, se han incautado de distintos objetos, incluidos dispositivos electrónicos y documentos.
Según Eurojust, la investigación, iniciada en 2011, muestra que los detenidos se comunicaban a través de internet y reclutaban adeptos para luchar en Oriente Medio.
Las investigaciones y la cooperación policial y judicial contra este grupo islamista se ha prolongado durante años en Italia y en otros países europeos, en particular Suiza y Alemania, y "reveló de manera progresiva la estructura y operaciones de esta organización terrorista", siempre según la unidad judicial europea.
Una red relacionada con el mulá Krekar
Los sospechosos son kurdos suníes y un kosovar que supuestamente pertenecen a la red conocida como Rawti Shax, que propugna el establecimiento de un régimen integrista islámico en el Kurdistán iraquí.
Esta organización sigue los preceptos de Najmuddin Ahmad Faraj, conocido como mulá Krekar, un clérigo musulmán residente en Noruega, contra el que también se ha emitido una orden de detención.
Krekar fundó el grupo Ansar al Islam, organización afiliada a Al Qaeda, pero asegura haberse desvinculado de sus atentados. SIn embargo, el clérigo consta en las listas de los terroristas buscados por Estados UNidos y la ONU.
En Noruega, Krekar ha sido condenado varias veces por amenazas e incitación al odio y es considerado una amenaza a la seguridad nacional, por lo que se encuentra pendiente de una orden de expulsión. Sin embargo, las autoridades noruegas no han hecho efectiva la orden porque Faraj podría ser condenado a muerte en Irak.
Según la investigación italiana, a diferencia de Ansar Al Islam, Rawti Shax creció y tiene su base en Europa, con células que se comunican y operan a través de internet.
Una "universidad virtual" del yihadismo
En un comunicado de los carabineros se explica que este mulá siguió controlando, tanto fuera como dentro de la cárcel la organización y "puede ser considerado el verdadero y propio ideólogo del islamismo (radical) a cualquier coste y capaz de, a través de internet, de llamar la atención de kurdos proselitistas por toda Europa".
Los investigadores lo describen como una "verdadera universidad virtual" con una página web propia para la acción de proselitismo.
Según las escuchas efectuadas por los carabineros italianos a Krekar cuando se encontraba en la cárcel, se ha podido descubrir que se estaban preparando acciones violentas en Kurdistán contra embajadas y también en Noruega como represalia por la detención del mulá.
También se proyectaba la posibilidad de "secuestrar a personal diplomático noruego presente en un país europeo o en Oriente Medio". Igualmente se descubrió que se perseguía la creación en "Italia y Holanda de células terroristas durmientes, denominadas como 'comités secretos' para dar apoyo logístico y financiero a la organización".