El fondo de rescate de la eurozona aprueba el desembolso de 2.000 millones del tercer rescate a Grecia

• Considera que el país ha aprobado las medidas a las que se había comprometido
• Desbloquea el pago, correspondiente al primer tramo aprobado en agosto

El primer ministro de Grecia, Alexis Tsipras.

El consejo de gobernadores del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), el fondo de rescate permanente de la eurozona, ha aprobado el desembolso de 2.000 millones de euros para Grecia, después de que los socios de Atenas dieran su visto bueno a las medidas adoptadas por el país heleno.

El Parlamento griego aprobó la semana pasada los requisitos pactados con los acreedores -incluida la ley de ejecuciones hipotecarias- que eran condición sine qua non para desbloquear esos 2.000 millones del tercer rescate. El dinero, según señala el MEDE en un comunicado, se usará principalmente para pagar vencimientos de deuda, afrontar atrasos y cofinanciar proyectos puestos en marcha con fondos estructurales de la UE.

"Este desembolso refleja el compromiso de las autoridades griegas con el programa y la implementación de la extensa lista de reformas esenciales. Estas incluyen reformas clave en el sector financiero, que son importantes para apoyar el proceso de recapitalización bancaria. Si el programa se mantiene fuerte, estoy convencido de que los esfuerzos de los ciudadanos griegos les permitirá hacer visibles los avances hacia una recuperación", ha asegurado el director gerente del organismo, Klaus Regling, en un comunicado.

Los 2.000 millones forman parte de un paquete de 16.000 millones de euros que autorizó el MEDE el pasado mes de agosto para cubrir las necesidades presupuestarias y refinanciar la deuda griega.

Una primera parte (13.000 millones de euros) se desembolsó el pasado 20 de agosto y ahora quedan aún por desembolsar otros 1.000 millones de euros que serán entregados cuando el país cumpla con un nuevo paqute de reformas, según el fondo de rescate.

En agosto, el MEDE transfirió a una cuenta propia en Luxemburgo 10.000 millones de euros destinados al plan de recapitalización de la banca griega. Este dinero aún no ha llegado a los bancos del país y la decisión formal de transferir los fondos será tomada por la junta de directores del MEDE caso por caso, tras las decisiones que se tomen respecto a la ayuda estatal.