La banca toma formalmente el control de Nueva Pescanova con vocación de permanencia "a corto y medio plazo"
- Los bancos no prevén hacer desinversiones ni a corto ni a medio plazo
- La deuda de la nueva empresa "rondará los 1.200 millones de euros"
- González-Robatto, administrador único hasta la designación del nuevo Consejo
Los bancos acreedores que forman el denominado G-7 (Banco Sabadell, Banco Popular, Abanca, Bankia, BBVA, CaixaBank y UBI Banca) han tomado formalmente el control de Nueva Pescanova con el nombramiento de Jacobo González-Robatto como administrador único hasta la designación del nuevo Consejo de Administración.
En la junta extraordinaria de accionistas, celebrada en la sede de la pesquera en Chapela-Redondela (Pontevedra), se ha dado un amplio respaldo al nombramiento de González-Robatto, que no ha tenido ningún voto en contra.
Tras su designación, el propio González-Robatto ha manifestado que los bancos no prevén hacer desinversiones ni a corto ni a medio plazo y solo en el "muy largo plazo" les gustaría una compañía "autónoma". Además, ha confirmado que no hay contactos con ningún inversor para dar entrada a nuevos socios en la compañía.
Según ha señalado, la deuda de la nueva empresa "rondará los 1.200 millones de euros", de los que los bancos tienen algo menos del 50%. "Si se divide esa deuda entre las siete entidades bancarias acreedoras, tampoco es una exposición que no podamos permitirnos", ha explicado.
El administrador único de Nueva Pescanova ha precisado que ahora la compañía tiene socios "estables y solventes", y que, en absoluto, vivirá una situación de "interinidad". Asimismo, ha confirmado que ha pedido a Deloitte que se mantenga como "gestor interino", por lo que "no habrá ninguna disrrupción en la actividad".
No se prevén ajustes de plantilla
Por otra parte, ha avanzado que el Consejo de Administración será nombrado entre enero y febrero próximos, y estará formado por "profesionales". En ese sentido, también ha recalcado que, aunque Nueva Pescanova sea una sociedad limitada, el Consejo estará sometido a "las mejores reglas de buen gobierno", y será "muy potente y muy profesional".
Ese nuevo equipo de dirección será el encargado de adoptar decisiones, entre ellas, la posibilidad de una nueva ampliación de capital, aunque González Robatto ha advertido de que es aún "prematuro" ponerse en ese escenario porque "lo primero es evaluar la situación patrimonial de Pescanova".
Los futuros directivos elaborarán un plan para Nueva Pescanova, con el fin de hacerla crecer y consolidar sus potencialidades. En ese sentido, no se prevén ajustes de plantilla, sino "trabajar" para mejorar las cifras y que la empresa "se gane el derecho a invertir" y "convenza" a los accionistas para hacerlo.
Según ha recordado el administrador de la compañía, la banca apostó por Pescanova "desde el primer día", inyectando capital pese a las dificultades por las que atravesó durante dos años, y lo hizo porque "cree muchísimo" en la empresa. "Los bancos hemos salvado Pescanova de la liquidación, una compañía señera en Galicia y con 12.000 empleos. Estamos aquí por responsabilidad", ha proclamado, y ha destacado el "enorme potencial" del sector.