Sánchez promete una "tarifa social" dotada con 120 millones para impedir cortes de suministro energético

• La tarifa se destinaría a impedir cortes de suministro de noviembre a marzo
• Sería una de las cinco primeras medidas si llega al Gobierno tras el 20D

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, antes de participar en un encuentro en Córdoba.

El candidato del PSOE a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha comprometido este jueves en Córdoba a que si gana las elecciones generales del 20D, creará una nueva "tarifa social" para "consumidores vulnerables" en términos de pobreza energética, que estará dotada con 120 millones de euros para impedir que se corte el suministro en los meses más fríos.

El candidato socialista ha participado en el encuentro Los desayunos organizado por el Diario Córdoba y ha aprovechado su intervención para adelantar una de las medidas que tomará en caso de ser investido presidente del Gobierno tras las elecciones del 20 de diciembre.

En este sentido, Sánchez ha adelantado que pondrá en marcha una tarifa "social" que garantizará la subsistencia de los "consumidores vulnerables" en materia de pobreza energética, y que, entre otras medidas, impedirá que se corte el suministro a estos usuarios entre el 1 de noviembre y el 31 de marzo.

Además, según ha especificado el líder de los socialistas, la suya será una propuesta que regulará quién está en situación de pobreza energética y considerará como un derecho social la cobertura de este servicio.

Una "calefacción social" en función de los ingresos

Así, ha manifestado que los consumidores vulnerables "accederán a una calefacción social en función de sus ingresos y no habrá cortes de suministros", y ha cifrado en unos 7 millones el número de españoles que en la actualidad tiene una "enorme dificultad para hacer frente a la factura energética", o que tiene que elegir "entre comer o pasar frío".

"Desde que gobierna Mariano Rajoy se ha multiplicado por dos la pobreza energética, hay 200.000 beneficiarios menos del bono social y sin embargo se pueden beneficiar del mismo segundas viviendas que están vacías", ha criticado Sánchez, que ha incluido la lucha contra este tipo de pobreza dentro de las cinco primeras medidas que tomaría en caso de ser elegido presidente del Gobierno.

El líder socialista ha señalado como principales desafíos la seguridad, la falta de oportunidades, la desigualdad, la falta de confianza en las instituciones y la convivencia dentro del marco constitucional, y ante estos retos, su apuesta es "emprender el camino de la reforma", una tarea que, según ha asegurado, el PSOE ya ha emprendido en otras ocasiones cuando se ha hecho cargo del país.

Las primeras medidas si llega al Gobierno

Del mismo modo, son cinco los grandes acuerdos que tomaría en sus primeros consejos de ministros, empezando por propulsar un pacto por la industria y la creación de empleo digno, que derogará la reforma laboral y recuperara el diálogo social.

A continuación triplicaría la dotación destinada a Educación y después aprobaría un ingreso mínimo vital para erradicar la pobreza infantil, antes de abordar en el cuarto consejo de ministros el pacto de estado por la violencia de género y finalmente abordar la ponencia para la reforma de la Constitución, apostando por el estado federal.

Sobre el ingreso mínimo vital, ha puntualizado que llegaría a 700.000 hogares y tendría una dotación de unos 6.000 millones de euros, que estarían vinculados a la formación.

Con respecto al estado federal, ha apostillado que se trataría de un modelo "autonómico, perfeccionado, eficiente y equitativo", pero además, preguntado por el tema, ha rechazado que Cataluña tenga un problema con España y viceversa.

A este respecto, ha apuntado que catalanes y españoles tienen los "los mismos problemas" que han creado Artur Mas y Mariano Rajoy, puesto que han sido los votos del PP y de CiU los que han aprobado la reforma laboral o la amnistía fiscal.

"Eso no tiene nacionalidad, sino ideología, la conservadora, la que comparten Mas y Rajoy", ha manifestado Sánchez, quien no obstante ha reconocido que es necesario adecuar la Constitución a la realidad de 2015.