La segunda huelga general en Grecia contra los recortes y la bajada de las pensiones registra una menor participación
- Un sindicato achaca la menor movilización a que aún no se ha debatido la ley
- Tsipras se ha comprometido a reducir un 1% del PIB en el gasto en pensiones
Grecia ha vivido este jueves la segunda huelga general del año que, pese a la contundencia de su reivindicación, protestar contra la bajada de las pensiones, ha registrado un menor seguimiento que el primer paro contra los recortes del Gobierno de Alexis Tsipras hace tres semanas, el 12 de noviembre.
Los dos mayores sindicatos de Grecia, ADEDY del sector público y GSEE del privado, han convocado el paro contra los recortes previstos en el tercer rescate acordado entre el Gobierno de Alexis Tsipras y los acreedores, y en particular, contra la reforma del sistema de pensiones que contempla recortes en las prestaciones y subidas de las cotizaciones.
Como suele ser habitual en Grecia, el paro ha tenido mayor respaldo en el sector público que en el privado.
El presidente en funciones de ADEDY, Stavros Kutsiumbelis, ha dicho a Efe que la participación es menor porque la nueva ley sobre pensiones aún no ha llegado al Parlamento. "La gente reaccionará cuando se introduzca el borrador en el Parlamento, cuando las ilusiones terminen y se demuestren las mentiras del Gobierno", ha afirmado.
Servicios mínimos en los hospitales
Los hospitales y centros de salud han funcionado con servicios mínimos durante toda la jornada, mientras en los colegios ha habido un seguimiento muy desigual, pues algunos han abierto y otros no debido a la huelga de los profesores de secundaria. Los barcos han estado amarrados y, si bien los ferrocarriles han parado del todo, el metro, el tranvía y los autobuses urbanos han funcionado durante las doce horas centrales del día. Numerosos vuelos nacionales han sido cancelados.
Dimitris Karayeorgópulos, portavoz de GSEE, ha asegurado que la participación en el sector privado ha sido "tan masiva como hace tres semanas". Los representantes de ambos sindicatos han avanzado que contemplan la convocatoria de nuevas huelgas generales.
El ambiente en la capital griega durante la jornada ha sido de relativa normalidad ya que casi todas las tiendas y los puestos del mercado central han abierto. Tan solo algunos establecimientos han permanecido cerrados durante el paso de la manifestación que ha transcurrido desde la céntrica plaza de Klathmonos hasta la de Syntagma, sede del Parlamento.
Según estimaciones de la Policía, en la marcha han participado unas 15.000 personas, unas 5.000 menos que la vez anterior. Durante el recorrido se han producido pequeños enfrentamientos entre los agentes antidisturbios y un grupo reducido de manifestantes que han lanzado cócteles molotov, a lo que los policías han respondido con bombas aturdidoras.
En la manifestación ha participado también el partido Unidad Popular, que nació de la escisión de Syriza en septiembre por su oposición a la firma del tercer rescate. "Este Gobierno no tiene futuro. Ha empezado la cuenta atrás. No les puede salvar ni (el centrista) Levendis ni un Gobierno de concertación nacional que defienda el rescate", ha dicho su secretario general, Panayotis Lafazanis.
Ahorrar un 1% del PIB en las pensiones
Atenas se ha comprometido ante sus acreedores a ahorrar entre 2015 y 2016 un 1% del Producto Interior Bruto (PIB) en las pensiones. Esto supone recortes en las pensiones suplementarias que forman una parte fundamental de los ingresos mensuales para muchos jubilados, y además, subidas de las cotizaciones. El sistema griego de jubilación consta de una pensión principal y una suplementaria, ambas públicas.
Tsipras ha tratado, sin éxito por ahora, de lograr un consenso con la oposición en esta espinosa cuestión y ha decidido retrasar la votación de la ley sobre pensiones hasta inicio del próximo año para ganar tiempo y generar un amplio debate, según medios locales.
"Los pensionistas son el sustento total de muchas familias y si no fuese por ellos algunos ya se habrían tirado desde un séptimo piso", afirma a Efe Mijalis, que era técnico de aviones de una aerolínea griega y ya está jubilado. "Ningún Gobierno ha aportado ni un dracma a las pensiones suplementarias, los fondos de la pensión suplementaria los han aportado los trabajadores y los patronos", recalca Mijalis.
Melina, una empleada de la principal compañía telefónica del país, defiende que "cualquiera que sea el Gobierno tiene que entender que estas medidas no son sostenibles".
Huelga de periodistas el miércoles
Los medios de comunicación se sumaron a la huelga el miércoles para poder informar de los acontecimientos de la jornada. Durante 24 horas no hubo informativos en las televisiones y radios, los periódicos digitales no actualizaron sus informaciones y la prensa escrita no preparó la edición que debía publicarse este día.
A nivel sectorial, los periodistas piden que su caja de pensiones continúe siendo independiente y no se incluya dentro de una caja unificada. Además, quieren que se mantenga la tasa del 20% que se impone a la publicidad en los medios y se aplique también a los digitales.