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El padre Román niega ante al juez los presuntos abusos a un menor

  • Dice que le sorprende la denuncia del joven, que ahora tiene 25 años
  • Asegura que tenía un "amor fraterno" por el denunciante

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El padre Román único imputado en la causa sobre supuestos abusos sexuales a un menor
El padre Román, único imputado en la causa sobre supuestos abusos sexuales a un menor.

El padre Román, único imputado en la causa sobre supuestos abusos sexuales a un menor, ha negado este viernes ante el juez los hechos que se le atribuyen en el auto de procesamiento y ha asegurado que nunca se exhibió desnudo ante el denunciante, que ahora tiene 25 años.

El procesado, que ha declarado en audiencia pública ante el titular del Juzgado de Instrucción 4 de Granada, Antonio Moreno, ha señalado que le sorprende la denuncia del joven, a la que no encuentra explicación salvo que tenga "interés económico".

Además, ha expresado su "absoluta" disconformidad con el auto de procesamiento y ha explicado que tenía, como sacerdote, un "amor fraterno" por el denunciante.

"No hay más, lo hago con cualquiera", ha dicho el procesado, que ha añadido que habitualmente no hablaba sobre sexualidad abiertamente y que sólo comentaban esporádicamente alguna noticia sobre esta materia.

Esta declaración indagatoria prestada por el imputado había sido fijada por el juez instructor después de que emitiera un auto de procesamiento contra el padre Román ante los "indicios racionales" de delitos cometidos supuestamente contra el joven, de 25 años, que lo denunció en 2014 por hechos ocurridos cuando éste era menor.

"De lo que no ha habido no puedo tener recuerdo"

En su declaración indagatoria, que se ha prolongado durante algo mas de diez minutos y en la que ha respondido a las preguntas del fiscal y de la acusación particular, el sacerdote ha explicado que no hubo "oportunidad" de que el joven denunciante, entonces menor, pudiera verlo total o parcialmente desnudo.

"De lo que no ha habido no puedo tener recuerdo", ha sentenciado el procesado, que ha detallado que, de manera esporádica y cuando el joven tenía 15 o 16 años, éste pernoctó en una casa de Los Pinillos, en Cenes de la Vega (Granada), donde según el auto del juez podrían haber ocurrido los hechos "mas graves y relevantes penalmente".

Respecto a último aspecto, ha detallado que el denunciante dormía "en la habitación que hubiera libre" de la planta superior y que no tenía por tanto "un sitio fijo" cuando se quedaba a dormir.

El padre Román también ha negado que, junto a otros sacerdotes, constituyera ningún tipo de grupo y, al ser preguntado por los motivos por los que varios jóvenes pudieron dejar de asistir a su parroquia, ha indicado que es "difícil" saber por qué alguien se va o deja de ir a la misma.

También ha sido preguntado por una carta escrita por el arzobispo de Granada, Javier Martínez, y por un correo electrónico que le envió al propio denunciante en el que hacía referencia a algún tipo de "relación" con este.

Proceso por presuntos abusos

Al término de la comparecencia, el abogado de la acusación particular, Jorge Aguilera, ha dicho a los periodistas que no esperaba que hubiera ningún "reconocimiento palmario" de los hechos: "Cierra el procedimiento en este momento, pero que no aporta ni quita mérito a lo que se ha instruido hasta la fecha", ha indicado.

La declaración indagatoria prestada esta mañana fue fijada por el juez instructor después de que emitiera un auto de procesamiento contra el padre Román ante los "indicios racionales" de delitos cometidos supuestamente contra el joven, que lo denunció en 2014 por hechos ocurridos cuando éste era menor.

Una vez practicada la indagatoria, previsiblemente el juez dictará un auto de conclusión de sumario y las actuaciones se elevarían al tribunal encargado de enjuiciamiento, una vez que las partes formalicen sus correspondientes escritos de acusación o defensa.

Aunque la causa, sobre la que llegó a pronunciarse el papa Francisco, ha llegado a contar con doce imputados, diez curas y dos laicos, de los que cuatro fueron detenidos, la Audiencia decidió declarar prescritos los delitos atribuidos a once de ellos, por lo que actualmente en el proceso sólo continúa el padre Román.