El peso argentino se devalúa un 42% tras el fin de las restricciones cambiarias
- El dólar sube desde los 9,83 pesos de este miércoles a los 13,95 pesos
- El "dólar blue" (mercado ilegal) se sitúa apenas un 3% más alto que el oficial
El peso argentino se ha depreciado un 42% frente al dólar, al cotizar en torno a los 14 pesos por unidad en bancos y casas de cambio, que intentan acomodarse a las nuevas condiciones del mercado, un día después de que el nuevo Gobierno de Argentina anunciara el fin de las restricciones para la compra de divisas,impuestas a finales de 2011 por el Ejecutivo de Cristina Fernández.
El denominado "cepo cambiario", que regía desde finales de octubre de 2011, ha sido suprimido este jueves, una vez que el Ejecutivo de Mauricio Macri hiciera efectiva una serie de medidas que han dejado sin efecto las numerosas restricciones para la compra de divisas.
El fin de las trabas ha provocado que el precio del dólar en el estatal Banco Nación saltara desde los 9,83 pesos para la venta de la cotización de este miércoles a los 13,95 pesos, lo que implica una devaluación del 41,9%. En otros bancos y casas de cambio del centro financiero de Buenos Aires la divisa estadounidense se ha vendido en torno a los 14 pesos por unidad.
El valor alcanzado se acerca al del denominado "dólar contado con liquidación", un tipo de cambio utilizado entre grandes operadores y que economistas y hasta el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, han señalado como el mercado más representativo para el precio del dólar. El "dólar contado con liquidación" había cerrado este miércoles en 14,32 pesos, pero este jueves ha retrocedido a 13,85 pesos.
Mientras que en el mercado ilegal, que floreció tras la imposición de las restricciones a la compra de divisas, el "dólar blue" ha retrocedido nueve centavos, hasta 14,48 pesos, apenas un 3% más que el precio oficial, cuando hasta este miércoles la brecha se acercaba al 48%.
"Debería atraer más inversiones extranjeras", según Moody's
El fin del "cepo" al dólar había sido anunciado por el Gobierno de Macri en la tarde de este miércoles, una vez que los mercados ya habían cerrado, y este jueves casas de cambio y bancos trataban de adecuarse a las nuevas condiciones de la plaza cambiaria. De hecho, las entidades bancarias han tardado unas horas en poner a punto sus sistemas para vender divisas, tanto en ventanilla como por internet, sin una autorización del Fisco, como se requería hasta ayer.
"Hoy todavía no es un día normal porque el mercado no funciona con fluidez, pero en los próximos días se va a normalizar", ha comentado el economista Martín Redrado, expresidente del Banco Central. Aunque Redrado ha calificado el fin de las trabas como "positivo", ha advertido de que debe analizarse cómo se reflejará en los precios, en momentos en los que Argentina tiene una tasa de inflación anual cercana al 25%.
En este sentido, Hugo Moyano, líder de la Confederación General del Trabajo, ha dicho que la central sindical no permitirá que el levantamiento de las restricciones afecte el "poder adquisitivo del salario" de los trabajadores.
Para Gabriel Torres, vicepresidente de la agencia Moody's en Argentina, la decisión del Gobierno de liberar el tipo de cambio y disminuir los controles sobre las divisas, no solo para los pequeños inversores sino también para los importadores y otros grandes operadores, "probablemente reducirá las distorsiones del mercado". "Esto debería hacer que las exportaciones sean más competitivas y atraer más inversiones extranjeras a la Argentina. Este es el tipo de cambio de políticas positivo en materia crediticia que preveíamos que llevaría a cabo el nuevo Gobierno", ha dicho Torres.
Por su parte, el presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Adelmo Gabbi, ha celebrado el fin de las restricciones, una de las grandes promesas de campaña de Macri, quien asumió la Presidencia hace una semana. Gabbi ha señalado que "hace muchos años que se esperaba la normalización de la economía, para que Argentina sea un país elegible en el mundo para invertir". "Este Gobierno no tiene culpa de tener que devaluar. Todos sabíamos que el dólar a 9,7 pesos no tenía el verdadero valor, sino que todos hablábamos a un precio muy superior", ha dicho.