La última redada de la policía belga por los atentados de París se salda con cinco personas interrogadas
- La operación, que empezó este domingo, se ha desarrollado en Bruselas
- La Fiscalía señala que partía de "una profunda investigación telefónica"
- Las autoridades admiten que no saben donde se encuentra Salah Abdeslam
La policía belga ha llevado a cabo una nueva redada relacionada con la investigación de los atentados de París que se ha saldado con la detención de cinco personas para ser interrogadas, aunque posteriormente han sido puestas en libertad, según ha informado la Fiscalía federal de Bélgica.
La operación empezó este domingo por la tarde y se ha prolongado hasta el lunes, cuando se han producido las dos últimas detenciones, aunque no se han hallado armas ni explosivos en ninguno de los dos registros efectuados.
Así, las autoridades llevaron a cabo un primer registro en el que detuvieron, este domingo por la tarde, a dos hermanos. Posteriormente se arrestó a un tercer individuo que la Fiscalía describe como uno de sus "amigos".
Investigación de las llamadas telefónicas
Ese primer registro tenía lugar justo en la frontera entre Molenbeek, el barrio bruselense de donde eran originarios varios de los terroristas de París, y el centro de Bruselas, en la sexta planta de un edificio de la calle de la Clé, muy cerca de la Grand Place.
La nota de la Fiscalía explica que la redada partía de "una profunda investigación telefónica" que había solicitado el juzgado de instrucción especializado en terrorismo y, aunque está vinculada con los atentados perpetrados en París el 13 de noviembre, no consistía en la búsqueda del principal sospechoso huido tras los ataques, Salah Abdeslam.
El segundo registro ha tenido lugar este lunes por la mañana en Laeken, otro suburbio de Bruselas, y durante el mismo han sido detenidas dos personas que, como el resto de los arrestados, han sido puestos en libertad tras ser interrogadas.
Salah Abdeslam sigue en paradero desconocido
La investigación de los atentados de París continúa de forma paralela en Francia y en Bélgica, de donde eran originarios varios de los terroristas que actuaron en París. Según una fuente francesa cercana al caso citada por AFP, uno de los terroristas que asaltaron la sala Bataclan envió un mensaje que decía "On est parti, on commence" (Salimos, empezamos) a un número de teléfono belga.
Las autoridades belgas mantienen en prisión preventiva a ocho personas acusadas de terrorismo en relación con los ataques del 13 de noviembre, pero desconocen el paradero del principal sospechoso, Salah Abdeslam, que volvió a Bélgica después de participar en los atentados superando hasta tres controles de policía en Francia.
“No lo sabemos, nadie lo sabe. Todo el mundo le persigue“
André Vardoren, el director del Órgano de Coordinación para el Análisis de las Amenazas (OCAM) de Bélgica, ha reconocido este lunes en una entrevista en la emisora Bel-RTL que las autoridades no saben dónde se encuentra Abdeslam: "No lo sabemos, nadie lo sabe. Todo el mundo le persigue", ha señalado.