Los líderes de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania acuerdan prolongar a 2016 los acuerdos de Minsk
- Putin, Poroshenko, Hollande y Merkel han hablado por teléfono sobre Ucrania
- Aunque no se ha aplicado el acuerdo completo, se mantendrá el alto el fuego
Los líderes de Rusia, Ucrania, Francia y Alemania han mantenido una conversación por teléfono este miércoles para evaluar la situación en el este de Ucrania en la que han acordado prolongar a 2016 los acuerdos de Minsk y, en concreto, el alto el fuego y la retirada de las armas pesadas de la zona del conflicto.
Así lo han confirmado en sendos comunicados el Kremlin y el Palacio del Elíseo, después de que Vladimir Putin, Petro Poroshenko, François Hollande y Angela Merkel, los líderes de los cuatro países signatarios de los acuerdos de Minsk, mantuvieran una de las habituales rondas de conversaciones que llevan a cabo desde febrero de este año, cuando se firmó el pacto.
La nota francesa especifica que los cuatro han acordado que sus ministros de Exteriores se reunán "de aquí a comienzos del mes de febrero" para examinar la situación de crisis en el este de Ucrania y la puesta en marcha de las medidas de esos acuerdos.
Aunque la extensión de los pactos de Minsk se daba por hecha, lo cierto es que las medidas acordadas no han sido implementadas por completo, pese a que se explicitaba que, por ejemplo, Ucrania debería haber recuperado en 2015 el control de la frontera con Rusia. Sin embargo, el alto el fuego se ha mantenido desde septiembre, a pesar de algunos enfrentamientos esporádicos entre los separatistas prorrusos y las fuerzas ucranianas.
Mantener el alto el fuego, principal objetivo
Así, el comunicado del Elíseo que los cuatro dirigentes "reafirmaron su compromiso para un alto el fuego en el este de Ucrania y la retirada concertada de las armas pesadas" rápidamente. Igualmente "subrayaron la importancia de la plena aplicación en 2016 del conjunto de las medidas de Minsk".
Además, en su entrevista telefónica han prestado "una atención particular" a los preparativos de los comicios locales en la región del Donbass, que incluye Donetsk y Lugansk, los principales focos de conflicto que sigue latente entre el Gobierno central ucraniano y los separatistas, apoyados por Moscú.
Según ambos comunicados, Putin, Poroshenko, Merkel y Hollande han manifestado su "apoyo" al grupo de trabajo encargado de los asuntos políticos, que debe ayudar desde ahora hasta finales de enero a definir las condiciones para la celebración de las elecciones en el Donbass junto a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
Los cuatro líderes se habían reunido por última vez para abordar la crisis del este de Ucrania en París el pasado 2 de octubre, cuando Putin y Poroshenko rubricaron el acuerdo para el repliegue del armamento pesado en presencia de Merkel y Hollande, garantes de los acuerdos de paz de Minsk.
Moscú y Kiev suspenden sus acuerdos de comercio
Pese a todo, la tensión entre Rusia y Ucrania no se suaviza: ambos países han suspendido este miércoles al mismo tiempo el acuerdo de libre comercio que les unía desde octubre de 2011, por lo que a partir del 1 de enero aumentarán los aranceles, una medida que estará acompañada de un embargo alimentario mutuo.
Así, Putin ha promulgado la ley que suspenderá el 1 de enero de 2016 la aplicación del acuerdo para la creación de una zona de libre comercio con Ucrania en el marco de la postsoviética Comunidad de Estados Independientes. Rusia había advertido de que anularía las preferencias comerciales con Ucrania si ese país y la Unión Europea no tenían en cuenta sus preocupaciones a la hora de poner en marcha el próximo año su Acuerdo de Asociación bilateral.
El Gobierno ruso asegura que el objetivo es impedir la entrada en Rusia de productos baratos de países comunitarios con etiquetado ucraniano y había exigido a Kiev y Bruselas un acuerdo jurídicamente vinculante para proteger su mercado. Además, Moscú impondrá a Kiev un embargo alimentario en represalia por su decisión de sumarse a las sanciones económicas occidentales por la anexión rusa de la península ucraniana de Crimea.
En respuesta, el Gobierno ucraniano ha anunciado que el 2 de enero entrará en vigor su decisión de suspender el acuerdo de libre comercio con Rusia, lo que fue autorizado la víspera por el presidente, Petró Poroshenko. El primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, ya aseguró este martes que su Ejecutivo tomaría contramedidas de respuesta, que serán "simétricas" a las rusas, por lo que Kiev también prohibirá el 10 de enero la importación de productos rusos.