El líder de la CUP, Antonio Baños, renuncia a su acta de diputado
- Se declara "incapaz" de defender la decisión de la CUP de no investir a Mas
- Aunque siempre se opuso a Mas, siente ahora una viva "frustración personal"
El portavoz de la CUP en el Parlament catalán, Antonio Baños, ha presentado su renuncia formal a su acta de diputado después de que su formación haya decidido este domingo no apoyar la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat, lo cual, si un giro inesperado de los acontecimientos no lo impide, aboca a Cataluña a volver a repetir las elecciones autonómicas en el plazo de unos dos meses.
El que fue cabeza de lista de la CUP en las elecciones del 27 de septiembre ha dirigido una carta a la militancia su partido en la que ha explicado que no se siente "capaz de defender la decisión" de la CUP tomada este domingo por "la mayoría de las bases de la organización" en su Consejo Político, cuyos 67 miembros decidieron no investir a Mas por un ajustado resultado de 36 votos en contra de la investidura y 30 a favor, con una abstención.
Esta es, según ha explicado Baños, "una postura política discrepante con las ideas y objetivos" por los cuales decidió presentarse como candidato en las elecciones del pasado 27 de septiembre.
"Mi paso a la política (dado hace unos cinco meses) tenía un solo sentido y objetivo: que esta legislatura fuese la de la ruptura irreversible con el Estado español y que, además, la construcción de la República se hiciese desde un proceso constituyente popular y social", ha señalado Baños, de 48 años, periodista especializado en temas económicos y escritor.
"Frustración personal"
Sin embargo, continúa, tras la "mayoría independentista" obtenida el 27S y el "mandato explícito del país" de afrontar "sin dilaciones ni dudas" la ruptura con el Estado, "es evidente" que él no ha "podido o sabido cumplir este mandato" y por eso toma la decisión de marcharse, reconociendo un "sentimiento de frustración personal muy vivo".
En realidad, Baños, en tanto que cabeza de lista de la CUP, defendió antes y después de las elecciones catalanas su oposición a la investidura de Mas como rechazo a la corrupción en CDC y a las políticas de recortes. Y también subrayó la necesidad de que los independentistas obtuvieran no solo una mayoría de escaños, sino también de votos, para iniciar el proceso de ruptura de Cataluña con el resto de España, al que sin embargo saludó tras conocer los 10 diputados que le otorgaban las urnas.
Antonio Baños termina manifestando su convencimiento de que "la República Catalana es el único camino para conseguir la transformación social del país" y por eso, en unas eventuales elecciones autonómicas anticipadas, llama al "fortalecimiento de la base social del independentismo", tarea de la cual no se desliga.
La CUP ha subrayado este lunes que la decisión tomada por su Consejo Político de no investir a Mas, tras el insólito empate a 1.515 votos en la Asamblea Nacional de la formación el pasado 27 de diciembre ha sido "una de las decisiones más difíciles que la CUP ha tenido que tomar nunca" y reconoce que "cuando muchas voces son escuchadas, el consenso requiere más sacrificios, más discusiones".
Esta mañana, la también diputada de la CUP Eulàlia Reguant ha admitido que la formación anticapitalista ha quedado "tocada" por el proceso de decisión que les ha llevado a vetar de forma definitiva a Artur Mas como presidente de la Generalitat, pero ha negado que pueda producirse una escisión en la formación.
De hecho, la número dos de la CUP, la diputada Anna Gabriel, garantizaba el apoyo de los antisistema a investir a un candidato a la Generalitat diferente a Mas, que podría ser tanto el líder de ERC, Oriol Junqueras, como un independiente, citando a Raül Romeva.