General Electric suprimirá 6.500 empleos en Europa dentro de la sección de energía de Alstom

• Se perderán 1.700 en Alemania, 1.300 en Suiza, 765 en Francia y 500 en España
• Cerrará dos centros de trabajo en Buñuel y Cornellà de Llobregat
• La empresa justifica el recorte de plantilla por el "contexto energético deprimido"

Un operario de General Electric.

El gigante estadounidense General Electric (GE) ha anunciado su intención de suprimir 6.500 empleos en toda Europa, dentro de las actividades de energía del grupo frances Alstom (adquirido por GE con el visto bueno de Bruselas), según informa la agencia France Press. El recorte conlleva la eliminación de 1.700 puestos de trabajo en Alemania, 1.300 en Suiza, 765 en Francia y unos 500 en España.

"El plan de reestructuración se extiende a varios países europeos y supondrá una reducción potencial de 6.500 empleos sobre un total de 35.000. En Francia, el recorte afectará a 765 trabajadores de una plantilla de 9.000" ha declarado un portavoz de GE.

En Francia, la reducción de personal se concentrará en la sede de Levallois, cerca de París, en las actividades ligadas a las redes eléctricas y se realizará mediante bajas voluntarias. La empresa mantiene su promesa de crear 1.000 empleos netos en Francia, algo a lo que se comprometió con el Elíseo.

Medio millar de trabajadores afectados en España

Fuentes de GE en España indicaron que "en nuestro país, el número de afectados sería aproximadamente de 500 personas". Añaden que van "a mantener una colaboración constructiva con los representantes de los trabajadores durante todo el proceso. Asimismo, vamos a trabajar con los empleados potencialmente afectados para identificar oportunidades de recolocación, dando prioridad a la movilidad interna y otras posibles soluciones".

General Electric cuenta con una plantilla de 300.000 empleados en todo el mundo, de los que 120.000 corresponden a Europa. La cifra de trabajadores de GE en España asciende a 3.400 empleados.

General Electric prevé cerrar dos centros en España: la factoría navarra de turbinas eólicas de Buñuel (103 trabajadores) y la barcelonesa de Cornellà de Llobregat, centrada en el diseño de nueva maquinaria del sector de la energía hidroeléctrica.

Además, reducirá a la mitad la plantilla de Alstom Wind en el centro de la ciudad condal lo que implica la salida de otras 230 personas. Los sindicatos consideran prioritario mantener este centro de trabajo que concentra el grueso del negocio offshore wind, un tipo de energía eléctrica con la que no cuenta GE.

Otros países de fuera de Europa se verán afectados por esta reestructuración, que General Electric justifica por un contexto energético deprimido, pero el grupo norteamericano no ha confirmado la eliminación de 10.000 puestos de trabajo en todo el mundo, avanzada por un diario regional francés, L'Est Républicain.

Tras largas negociaciones en las que tuvo un papel destacado el Estado francés, la multinacional estadounidense cerró en noviembre la compra de los negocios de energía y redes de Alstom, empresa industrial emblemática que sigue fabricando los trenes de alta velocidad franceses. Culminó así un proceso iniciado en 2014 tras recibir la autorización de los reguladores de más de 20 países y regiones, incluyendo la Unión Europea, Estados Unidos, China, India, Japón y Brasil.

Críticas sindicales

Sobre la reestructuración, un responsable del sindicato CFE-CGC, ha acusado a la empresa de acometer "un plan de recorte bursátil para ahorrar 3.000 millones de dólares, lo que se traduce en la pérdida de 10.000 empleos hasta finales de 2017".

Otro sindicalista, Laurent Santoire de la CGT, ha añadido que el único objetivo de la reducción de plantilla es "aumentar el valor de las acciones de General Electric" y comenzar con "el desmantelamiento de las actividades de energía de Alstom en Francia y en Europa.

El portavoz del Gobierno francés, Stéphane Le Foll, ha asegurado que el Ejecutivo galo vigilará de cerca los compromisos de General Electric. "Verificaremos de forma exacta el número de empleos creados por GE en función de los compromisos adquiridos", ha subrayado el ministro de Economía, Emmanuel Macron. "Todo empleo eliminado en Francia deberá ser compensado", ha recalcado.