AI denuncia torturas, represión policial y retroceso de las libertades en Túnez

• Amnistía Internacional hace balance desde la 'revolución del Jazmín'
• Seis detenidos habrían fallecido bajo custodia sin ninguna consecuencia
• Se muestra crítica con la nueva ley antiterrorista aprobada en julio de 2015

Protestas en Túnez por la represión policial

Cinco años después de que la "revolución del Jazmín" derrocara la dictadura de Zine el Abedin Ben Ali, la represión policial, la tortura en los interrogatorios y la muerte de detenidos bajo custodia ha vuelto a repuntar en Túnez, según un informe publicado por la organización de defensa de los Derechos Humanos 'Amnistía Internacional'.

La publicación incluye datos, informaciones y entrevistas realizadas a lo largo del pasado mes de diciembre. "Hace cinco años los tunecinos y las tunecinas se levantaron y se sacudieron las cadenas del autoritarismo. La tortura y la represión eran características del régimen del expresidente Ben Ali", explica el informe.

"No se debe permitir que se conviertan en rasgos definitorios del Túnez posterior al levantamiento", recomienda el documento, firmado por el director adjunto del Programa Regional para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional, Said Boumedouha.

Seis detenidos fallecidos bajo custodia

Según las cifras recabadas por AI, desde 2011 se han producido al menos seis muertes bajo custodia en circunstancias que no han sido suficientemente investigadas.

La organización destaca el caso de Sofiene Dridi, un hombre sobre el que pesaba una orden judicial de detención por presuntos delitos cometidos en 2011 y que fue detenido a su llegada al aeropuerto de Túnez el 11 de septiembre de 2015, tras ser expulsado de Suiza.

"Dridi compareció ante un tribunal el 15 de septiembre en buen estado de salud y tras la vista fue trasladado a la prisión de Mornaguia. El 18 de septiembre se informó a su familia de que lo habían llevado al hospital", señala el informe.

“Dridi falleció dos días después de ser detenido“

"La familia acudió a visitarlo, pero el personal médico negó todo conocimiento sobre él, tras lo cual regresó al tribunal para tratar de obtener más información; allí les dijeron que Sofiene había muerto de una parada cardiaca", agrega.

Según AI, tras ver su cadáver en la morgue, la familia denunció hematomas en la cara y reveló que su certificado de defunción estaba fechado el 17 de septiembre. Hasta la fecha, la familia sigue esperando conocer todos los detalles de la causa de la muerte.

"Amnistía Internacional también recibió información sobre torturas y malos tratos a detenidos y detenidas mientras estaban en prisión el año pasado, tras ser arrestados por terrorismo", subraya el informe.

"Según algunos de los testimonios, las víctimas eran sometidas a descargas eléctricas, incluso en los genitales, y a una postura en tensión conocida como "pollo asado" en la que se las esposa de pies y manos a un palo", agrega.

"Algunas también fueron abofeteadas y obligadas a desnudarse, y recibieron amenazas contra sus familias para tratar de que firmasen una confesión falsa", insiste.

AI demanda justicia tras estos actos

Ante esta situación, la organización internacional demanda a las autoridades tunecinas que permitan y fomenten la investigación libre e independiente de estas denuncias, publique los resultados y procese a los eventuales culpables.

"Demasiado poco se ha hecho para reformar las fuerzas de seguridad y exigir cuentas a los responsables de este tipo de actos", recalcó Boumedouha.

“La seguridad no puede ser pretexto para retroceder en materia de derechos humanos“

"Aunque es comprensible que, tras los sangrientos atentados que han sacudido Túnez en los últimos 12 meses, la seguridad sea una prioridad para el gobierno, ésta no puede ser el pretexto para hacer retroceder los modestos avances en materia de derechos humanos alcanzados desde el levantamiento", constata.

AI reconoce que en los últimos cinco años, Túnez ha adoptado una nueva Constitución que contiene importantes garantías de derechos humanos, ha ratificado tratados internacionales clave de derechos humanos y ha celebrado elecciones presidenciales y parlamentarias democráticas.

Polémica ley antiterrorista

"No obstante, el año pasado las autoridades adoptaron una serie de preocupantes medidas so pretexto de la seguridad que podrían poner en peligro estos logros", afirma.

A este respecto, critica la nueva ley antiterrorista aprobada por el Parlamento en julio de 2015, ya que define el terrorismo en términos excesivamente generales, confiere a las fuerzas de seguridad amplias facultades de supervisión y vigilancia, y extiende la medidas de represión.

"Los logros de Túnez en materia de derechos humanos son cada vez más frágiles en este contexto de retroceso. Existe el riesgo real de que esta mal planteada reacción adversa lleve de nuevo a Túnez al oscuro lugar en el que estaba hace cinco años", concluye Boumedouha.