España tiene un elevado riesgo de pérdida de capital humano, según el Consejo Económico y Social
- Un alto porcentaje de jóvenes que ha dejado los estudios carece de empleo
- Las estructuras del empleo se polarizan con menos ocupaciones intermedias
- El CES reclama políticas dirigidas a fomentar la formación permanente
España ofrece un elevado riesgo de pérdida de capital humano, con altos costes económicos y sociales, según un informe del Consejo Económico y Social (CES), que alerta de un importante porcentaje de jóvenes que han abandonado los estudios, no participa en ninguna formación, carece de empleo y no lo busca activamente.
Se trata de uno de los datos "más preocupantes" del informe Competencias profesionales y empleabilidad, que ha elaborado el CES y que ha sido presentado en Mérida (Badajoz) en el marco de unas jornadas que han sido inauguradas por el presidente del CES, Marcos Peña, su homóloga en Extremadura, Mercedes Vaquera, y el jefe del Ejecutivo extremeño, Guillermo Fernández Vara.
En el marco de la necesidad de "una correlación positiva entre niveles adecuados de educación y formación y la empleabilidad", el informe indaga en el comportamiento y en las posibles tendencias, a corto y medio plazo, de los empleos y de las cualificaciones demandadas.
Los datos evidencian un mayor riesgo de desempleo según crece la edad para las personas con educación secundaria de carácter profesional que para las personas con educación secundaria general, lo que sugiere que la relación entre cualificaciones y competencias es importante para el mantenimiento y desarrollo de la empleabilidad.
Las estructuras del empleo se están transformando hacia un modelo polarizado
Además, el informe remarca que las estructuras del empleo de los países más desarrollados se están transformando hacia un modelo polarizado, presidido por un mayor peso del empleo más cualificado (técnicos y profesionales) y también, en un proceso "aparentemente paradójico", de mayor peso de categorías de empleo con un grado bajo o medio de requerimientos de cualificación, asociadas a actividades de servicios.
En contrapartida, se ha reducido el peso de las ocupaciones intermedias, entendidas como puestos administrativos y manuales cualificados. "El empleo en España tiene todavía un nivel medio de cualificación inferior al de los principales países de la UE", recoge el informe.
Por ello, incide en la necesidad de fijar políticas encaminadas a configurar un modelo menos polarizado, reduciendo el peso del extremo inferior de las cualificaciones y aumentando el de las altas e intermedias, "y contribuir de manera más equilibrada, desde el punto de vista económico y social, a un crecimiento sostenido".
Respecto a la cuantificación actualizada de las titulaciones, los datos indican que en casi tres cuartas partes de las ofertas estudiadas en 2014 se pedía alguna titulación de carácter profesional, ya sea de FP o universitaria.
Asimismo, la experiencia se encuentra como requisito en el 71% de los puestos analizados, con una media de 3,5 años solicitados como experiencia mínima, lo que apunta al problema de la inserción inicial para los jóvenes.
Por lo que respecta al sistema educativo, el informe señala la necesidad de "asegurar una mayor estabilidad de los elementos esenciales y las líneas maestras de la educación sobre la base de un amplio consenso social y político". Para el CES, es conveniente emprender políticas dirigidas a fomentar la formación permanente, en especial en los colectivos más vulnerables, precisamente los que tienen mayores dificultades de mantenimiento y adquisición de competencias.